MIAMI (EE.UU.) Al menos 17 personas murieron ayer en un tiroteo registrado en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de la ciudad de Parkland, en el sureste de Florida (Estados Unidos), según varios medios que citan fuentes oficiales.

Al menos 14 personas fueron trasladadas a centros médicos cercanos heridas de diversa gravedad, según el jefe de la policía del condado de Broward, Scott Israel. Se hablaba de 50 heridos en total.

La policía detuvo a un sospechoso, un joven que unos 18 o 19 años que fue alumno del centro, aunque los agentes de élite SWAT todavía están en el lugar de los hechos para garantizar que la zona es segura

El senador por Florida Bill Nelson y el superintendente de Educación del condado de Broward ya habían indicado que había "víctimas mortales", aunque sin marcar una cifra concreta.

La Policía de Broward indicó a través Twitter que 14 heridos han sido trasladados a un hospital cercano.

En un primer momento se informó de que al menos una veintena de personas resultaron heridas en este suceso, aunque el Departamento de Bomberos de la vecina ciudad de Margaret elevó esa cifra hasta medio centenar.

El alguacil del condado de Broward, Scott Israel, confirmó que el sospechoso fue detenido y que se cree que actuó en solitario, aunque el lugar registraba todavía una gran actividad policial.

Las imágenes de televisión mostraron a cinco agentes de policía esposando e introduciendo en una patrulla a un sospechoso, que personas conocedoras del sucesos adelantan que se podría tratar de un antiguo alumno del centro, según CBS.

Se desconoce todavía si los heridos son leves o de gravedad, aunque en las imágenes de televisión puede verse a personal médico trasladando a numerosas víctimas en ambulancias.

Tanto el gobernador de Florida, Rick Scott, como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, seguían de cerca la investigación del tiroteo, y han conversado entre ellos sobre lo sucedido, y el dirigente local tiene previsto visitar el centro educativo, que tiene cerca de 3.000 alumnos, para conocer de primera mano los detalles de la operación.

Trump lamentó a través de Twitter el "terrible" tiroteo y dijo que "ningún niño, maestro ni nadie más debería sentirse jamás inseguro en una escuela estadounidense".