DONOSTIA. El agua ha entrado desde anoche en locales y bajos de esa zona, de donde han sido evacuadas de sus viviendas un total de 25 personas de Okendotegi, El Pilar y Antzieta y trasladadas a Etxarriene o al Hogar del Jubilado de Loiola.

Se mantiene la reunión de responsables municipales con los vecinos de Martutene a las siete de la tarde, aunque se celebrará en la iglesia y no en la ikastola como se había previsto inicialmente.

Según las últimas mediciones, de las 17:40 horas, el nivel del Urumea se encontraba en 4,67 metros, por debajo de los 4,7 que ha alcanzado esta mañana.

INUNDACIONES DE 2011

Las intensas lluvias que han caído en las últimas horas en Gipuzkoa han situado de nuevo la preocupación en el río Urumea y concretamente en los barrios donostiarras de Martutene y Txomin-Enea que se encuentran en "situación de evacuación" y podrían alcanzar los niveles de inundación de 2011.

Estos barrios de Donostia, acostumbrados a reiterados desbordamientos del río, vivieron en esas fecha unas de las peores inundaciones de su historia, que anegaron bajos, garajes y viviendas y obligaron al desalojo de los vecinos en barcas.

Martutene y Txomin-Enea

Desde anoche el agua ha entrado en locales y bajos de Martutene y Txomin-Enea, de donde han sido evacuadas de sus viviendas un total de 25 personas de Okendotegi, El Pilar y Antzieta y trasladadas a Etxarriene o al Hogar del Jubilado de Loiola.

Los cortes de luz y el cierre al tráfico de varias carreteras se ha repetido a lo largo de la mañana en la que se ha mantenido operativo el servicio de autobuses al centro comercial de Garbera, adonde habitualmente trasladan los vecinos de estas zonas sus vehículos ante un riesgo de inundación.

Las líneas de autobuses que comunican el barrio con otras zonas de Donostia llegan hasta Patxillardegi, donde se conectan con un servicio lanzadera en microbus para completar el recorrido.

El alcalde de la ciudad, Juan Karlos Izagirre, quien recorre la zona desde primeras horas de la mañana, ha asegurado que la situación de alerta roja en Txomin-Enea y Martutene se mantendrá posiblemente todo el día de hoy.

Ha afirmado que hoy no se podía estar "encerrado" en el Ayuntamiento y por ello ha suspendido el Pleno ya que quería estar con los vecinos.

De ellos ha destacado un comportamiento "ejemplar" y ha reconocido que entiende su "enfado" acumulado durante años por la persistencia de las inundaciones, aunque ha subrayado que "durante esta legislatura se dará una solución definitiva" a este problema.

La responsable de la ikastola de Martutene, que ha suspendido las clases, ha indicado que, por el momento, el agua no ha entrado en las instalaciones del centro, donde ayer padres y profesores subieron a la segunda planta muebles y aparatos tecnológicos para evitar lo que sucedió hace cuatro años, cuando se quedaron "sin nada".

También la consejera de Medio Ambiente, Ana Oregi, junto con el director de la Agencia Vasca del Agua (Ura), Iñigo Anzola, y el viceconsejero de Seguridad, Josu Zubiaga, se han desplazado a la zona afectada para comprobar los efectos del temporal que repercuten también en otras poblaciones de la cuenca del Urumea como Hernani y Astigarraga.

A pesar de la tregua de pocas horas que ha dado la lluvia en el este de Gipuzkoa, Euskalmet advierte de que a partir de las 18 o 19.00 horas otro frente frío, el último de este temporal, alcanzará el País Vasco con lo que se prevén lluvias moderadas que irán remitiendo mañana a partir de mediodía.

El Departamento de Seguridad coincide en que la situación mejorará a partir de mañana en los tres territorios, aunque hoy se mantendrá la alerta naranja por lluvias persistentes en el este de Gipuzkoa, donde se podrían superar los 60 litros por metro cuadrado en 24 horas.

Además de los problemas que afectan a Hernani, Astigarraga y los barrios de Donostia, por la crecida del Urumea, preocupan los embalses de la cuenca del Zadorra, en Araba, y el del Añarbe, en Gipuzkoa, donde están previstos "desembalses de menor nivel".

Las precipitaciones han originado además varios desprendimientos en la red viaria guipuzcoana y alavesa y han obligado a desviar a primeras horas a Pamplona un vuelo procedente de Madrid con destino Donostia.