NO son ni El Rubius ni Wismichu. Ni tienen millones de seguidores. Ni falta que les hace. Porque como dicen estos tres hermanos de Usansolo, Mikel (30 años), Jon (28) y Ane (21), “seguro que no somos los mejores youtubers pero somos jóvenes activos y comprometidos que queremos generar contenido en euskera en la red y simplemente con conseguir que más gente se anime a usar este idioma nos damos por satisfechos”, declaran. La idea del canal surgió en una comida familiar ya que Ane estudia lenguas modernas y Euskal Filologia y realizó una tesis sobre la presencia del euskera en Youtube. “En ese momento el peso del euskera era mínimo y decidimos colgar vídeos en Youtube con la ilusión de incrementar el euskera en ese ámbito digital que todo el mundo usa a diario”, indica Ane Atxutegi.

El contenido del canal es casi un reality de la familia Atxutegi. “Es supervariado desde cantar canciones, hasta cocinar, hacer disfraces, pintar caras, trivials... Abrimos la puerta de nuestra casa y cada uno enseña lo que sabe, muestra sus aficiones y hacemos contenido variado para todo tipo de público”, afirma Mikel que, como buen primogénito, lleva la voz cantante. Pero Jon matiza, “al principio cada uno hacía algo diferente, pero luego vimos que el contenido que más interesaba era el más lúdico. Por eso hay sesiones haciendo zumba de aquella manera, o sesiones de yoga. Consiste en divertirnos nosotros y divertir a la gente para que pase un buen rato”, recalca Jon, asegurando que desde pequeños están acostumbrados a jugar y hacer trastadas juntos y que, además, “somos muy de faranduleo”.

“Nuestro material es bastante casero, pero queremos mostrar que con ganas puedes llegar a donde quieras. Porque de empezar en la cocina con una cámara sin micrófono ni nada, yo he pasado a estar en una plataforma digital, Beitu, a colaborar en un programa en ETB, en una sección en la radio...”, explica Ane. Y es que la joven ha sido además la encargada de impartir la formación de B-Tuber en Euskararen Etxea, con el objetivo de animar a los jóvenes a crear, editar, producir y reproducir vídeos y crear y gestionar canales.

Cuentan con una nutrida red de fans, “nos siguen los familiares, los amigos cercanos -bromean- y mucha gente de Usansolo que alguna vez hasta nos para en la calle y nos pide un autógrafo o una foto”. Los aitas, que al principio eran escépticos, ahora lucen orgullosos, animados por los followers que les recalcan qué guapos son sus hijos, y qué bien lo hacen. Y es que en Usansolo son muchos los vecinos euskaldunes. “Al ser un pueblo pequeño, los que hablamos euskera tenemos más facilidad para comunicarnos porque casi todos entienden”, resalta Mikel. Y el canal refleja ese habla coloquial. “Es todo tan natural que igual metemos alguna expresión en erderaz. Es el uso informal del euskera con nuestro euskalki porque somos vizcainos y así lo hemos aprendido y mamado”, remarca convencido Jon.