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Atrapado por las adicciones

Hasta hace poco acudir al psicólogo o al psiquiatra no estaba bien considerado. Generaba un estigma negativo y tendía a ocultarse en el contexto social del paciente. A día de hoy, las cosas han cambiado. Pedir ayuda o acudir a algún especialista es considerado recomendable y preventivo

Atrapado por las adicciones

Hazkunde es un centro privado de atención en salud mental cuyo objetivo principal es dar respuesta a las diferentes situaciones, patológicas o no patológicas, de las personas dentro de este área de la salud a lo largo de su vida.

Partiendo de un prisma totalmente profesional, a través de un funcionamiento bien coordinado, pluridisciplinar, con un equipo de profesionales especializados en el campo de la psicología y la medicina, el centro intenta dar respuesta a los distintos aspectos que los pacientes plantean en cuestiones de bienestar psíquico o necesidades de salud mental.

En definitiva, Hazkunde abre sus puertas a estas personas con una cálida acogida, pero al mismo tiempo rigurosa, además de ofrecer un acompañamiento global centrado en la persona y un adecuado enfoque de cada caso individual, bajo el reto de poder conducirlo a sus necesidades específicas en diagnóstico y tratamiento.

En cuanto al ámbito de atención, la responsable de Hazkunde, Libe Mariscal, puntualiza que “el centro recibe las solicitudes de atención psicológica sin establecer una limitación preliminar para los motivos de consulta; ahora bien, al mismo tiempo somos respetuosos con las limitaciones que algunos diagnósticos y contextos de salud pueden presentar en sí mismos para ser atendidos en el ámbito de la atención privada”.

Atendemos cualquier demanda, continúa Mariscal, dando como mínimo una respuesta orientativa a cada caso, siempre bajo un enfoque leal con las necesidades de la persona que la realiza, sin empeñarnos en asumir atenciones que puedan sobrepasar nuestras capacidades asistenciales.

Respecto al equipo humano, el centro cuenta con psicólogos/as, médico de familia y psiquiatras, y entre todos intentamos responder a las necesidades individuales de la persona, tanto en atención individual como atención coordinada e, inclusive, grupal, ya sea en circunstancias de adversidad, en su exposición específica a distintos tipos de estrés, o en el contexto de los diferentes diagnósticos de salud mental.

Cuando una persona contacta con Hazkunde se pone en marcha un proceso de valoración activa del caso, de forma que tanto por consideración de los planteamientos de atención que establece la persona, como por la aplicación de criterios profesionales, el paciente podrá recibir desde atención psicoterapéutica o psiquiátrica general, hasta la derivación a programas más específicos de atención, entre los que destacan el dedicado a las toxicomanías y el dedicado a los trastornos de la conducta alimentaria.

Se trate de lo que se trate, aquello que Hazkunde ponga en marcha para intentar dar respuesta a la persona que solicita atención, se constituirá en un producto profesional, riguroso, delicado, personalizado y leal, tanto por acción, como por omisión, de cada uno de los actos que el producto clínico integre o evite. Por ejemplo habrá casos en los que se pueda evitar el empleo de psicofármacos; otros, en cambio, recomendarán su empleo; y ello dependerá de criterios puramente profesionales. Y, por supuesto, como nuestros pacientes conocen bien, en ningún caso se generarán costes que no sean estrictamente necesarios para tratar las dificultades que las persona planteen, intentando proporcionar, en resumen, una atención “a medida” de cada persona, siendo esta, “la persona” el eje alrededor del cual Hazkunde establece su política.