BILBAO. Un fotógrafo resultó herido mientras cubría una boda en Líbano después de que el novio disparara al aire con un fusil de asalto AK-47. Los primeros tiros cumplieron su cometido y salieron en dirección ascendente hacia el cielo.
Sin embargo, el tirador no contaba con el retroceso del arma, que hizo que el arma se descontrolara y una ráfaga de balas se dirigiera directamente hacia una mesa repleta de invitados dejando como único herido al hombre que estaba filmando la celebración.