Bilbao -Alicia Borrachero da vida a Carmen, una mujer que ve cómo cambia su vida y la de su familia cuando su hija desaparece el día de su comunión. Una búsqueda angustiosa que termina con la muerte de la pequeña y un guión en el que todos son sospechosos.
Un papel duro el que interpreta en esta serie.
-Especialmente duro, el de una madre que pierde a su hija en unas circunstancias tan dramáticas que es muy difícil de imaginar. Ha sido uno de los papeles más difíciles que he interpretado a lo largo de mi carrera.
¿Cómo se asume?
-Desde el respeto y desde la lucha por conseguir que sea creíble, pero sin dejar de pensar en las personas que han pasado por esta terrible situación de forma real.
¿Esperaban el éxito que está teniendo la serie entre el público?
-Sabíamos que estábamos haciendo algo que merecía la pena, que estaba muy bien planteado y que nos gustaba. Había esa sensación en el equipo de que lo que hacíamos nos estaba llenando mucho. Era casi seguro que tenía que gustar, pero nunca sabes hasta qué punto va a calar o se va a ver.
Un trabajo en televisión depende de más circunstancias que la calidad, ¿no?
-Por supuesto, cuenta mucho a quién vas a tener de compañero en la competencia esa noche, del día de emisión; son muchas las circunstancias a las que se enfrenta un producto, pero nosotros sabíamos que teníamos un buen trabajo entre manos y una historia que iba a gustar, lo que no sabíamos hasta qué punto iba a llegar al espectador.
En esta serie ha sido hasta sospechosa de la muerte de su hija.
-Sospechosos hemos sido todos, ocurre en la vida real, el entorno más cercano es el primero en ser investigado.
Tiene que ser duro en la realidad.
-No me lo puedo ni imaginar. Para hacer este personaje te pones en la situación de los que lo han pasado, pero casi ni te aproximas porque la realidad supera todo lo que tú puedas interpretar en situaciones de este tipo. Tiene que ser duro, muy duro, que desaparezca tu hijo o tu hija y seas investigado.
Ser madre ayuda a ponerse en el papel de Carmen, la mujer a la que usted da vida.
-Te puedes hacer una idea pero no llegas al fondo de lo que tienen que ser esos sentimientos en la vida real. Seguro que son una tortura que nunca te abandonan. Yo he intentado hacer un papel creíble, que no moleste a los que han pasado por este tipo de situaciones.
¿Cómo ve su momento profesional?
-El cine, el teatro o la televisión son escenarios muy duros para trabajar; lo han sido siempre, pero en estos momentos esa dureza se incrementa por la crisis. Estoy remontando, pero veo a mi alrededor que hay mucha gente de la profesión que no tiene trabajo. Yo estoy remontando, he hecho Bajo sospecha y veremos cómo seguimos.
Ustedes los actores siempre dicen que viven en una perpetua crisis, ¿están más preparados ante situaciones como la que se está viviendo ahora?
-Quizá hemos sido más previsores. Sabemos que un tiempo trabajas y luego puedes estar muchos meses sin tener nada; pero esta crisis nos ha afectado mucho a todos. Hemos sufrido largos parones pero hay que seguir adelante y siempre piensas que esto va a pasar y que pronto estarás trabajando.
¿Es una mujer optimista?
-No te queda más remedio que serlo, no te puedes hundir y si una cosa no sale tienes que buscar otros caminos.
A veces soñamos con un tiempo de descanso.
-Sí, viene bien para muchas cosas, pero cuando ya has descansado, has organizado todo eso que te queda pendiente en tu vida y en tu casa cuando estás trabajando, cuando el tiempo libre va más allá de lo necesario empiezas a necesitar que surjan nuevos proyectos que te sumerjan de nuevo en ese caos que son las grabaciones con sus horarios intempestivos, las funciones de teatro... en fin, el mundo real de un actor.
¿Qué ve cómo espectadora? ¿Qué géneros de ficción le gustan?
-Para ver una serie no me guío por los géneros, trato de buscar la calidad y la sorpresa, que me traten como alguien inteligente. Lo que más me ofende es cuando al público se le trata como a una masa que no piensa y que no tiene criterio.
¿Podría decir algún título?
-Me gustan las series que buscan la calidad y desde ahí me da igual que sea una comedia, de acción, drama? Como actriz, quizá me guste más ver las series más dramáticas, pero disfruto mucho con todo lo demás. Por ejemplo, no me pierdo Juego de tronos o Modern family y me encantaría participar en esta última.
¿Sería una buena espectadora de ‘Bajo sospecha’? Imagínese que no trabaja usted en ella.
-Me imagino que sí, que la vería, que me interesaría mucho la historia; pero no soy objetiva porque ya no me imagino a Carmen sin verme a mí como actriz y dentro de ella. Es una historia que llena porque la hemos visto en la vida real, son historias que se ven en los periódicos, en las noticas. Siempre que una serie esté bien hecha me gustará.
¿Qué programas ve ?
-Tengo poco tiempo para ver la televisión, pero igual que en la series, siempre veré algo que me aporte una visión diferente de las cosas y siempre desde la calidad. No me gustan ciertos programas que sé que son muy vistos, pero que en ningún momento me voy a sentar a verlos; sin despreciar a los que los ven, yo no perdería el tiempo con ellos.
¿Cómo surgió su afición con el teatro?
-La culpa tuvo mi abuela que nos llevó a mi hermano y a mí a ver un musical cuando éramos muy pequeños y yo me quedé enamorada. Quería estar en el escenario, ser como los actores que estaban allí. A mi hermano no le gustó entonces, pero yo supe que quería ser actriz.