El tiempo primaveral ha llegado a Euskadi para quedase durante varios días. La segunda mitad de febrero comienza con máximas que rozan los 20 grados y sin precipitaciones, lo que invita a hacer excursiones a lugares cercanos.
Uno de los sitios más visitados por los vizcainos a la hora de hacer escapadas de un día es Iparralde, y Biarritz destaca como uno de sus municipios más característicos.
Según el influencer Iñaki Ibaibarriaga, popular por protagonizar los vídeos de la cuenta Guk Green, que recomienda restaurantes, rutas o diferentes zonas para visitar en Euskadi, al ir a Biarritz hay que visitar cinco lugares.
En primer lugar hay que ir a Rocher de la Vierge, un arrecife rocoso, para disfrutar de las vistas y hacerse una foto en su emblemático arco. Asimismo, dar un paseo por el puerto de la localidad es un plan obligatorio, ya que se trata de uno de los puertos más pequeños del mundo.
La calle comercial también es digna de visitar, especialmente para buscar al característico oso, así como las playas de Biarritz, que ofrecen la oportunidad de disfrutar de espectaculares atardeceres.
Las calles y edificios de Biarritz son un reclamo turístico, por lo que también se debe pasear sin rumbo fijo y disfrutar de los pequeños encantos de la ciudad.
Biarritz: la escapada perfecta
Si buscas una escapada de un día con encanto, Biarritz es una opción ideal desde Bilbao. A 148 kilómetros de la capital de Bizkaia, esta elegante ciudad costera ofrece una combinación única de playas, cultura y gastronomía.
En menos de una hora en coche o autobús, puedes sumergirte en un ambiente sofisticado con un toque bohemio, perfecto para desconectar sin alejarte demasiado.
Surf, paseos y vistas panorámicas
Empieza el día con un café en una de las terrazas del Port Vieux, el antiguo puerto pesquero que ahora es un rincón encantador lleno de vida. Desde ahí, un paseo por el Rocher de la Vierge, un islote unido a tierra por un puente de hierro, te permitirá disfrutar de unas vistas espectaculares del Atlántico y de la costa vasca.
Si eres amante del surf, Biarritz es un paraíso. La Grande Plage y la Playa de la Côte des Basques son dos de los lugares más icónicos de Europa. Incluso si no practicas este deporte, merece la pena contemplar a los surfistas desafiando las olas en un entorno impresionante.
Un festín gastronómico
Biarritz es un destino gastronómico de primer nivel, con una mezcla de influencias francesas y vascas. Para el almuerzo, puedes optar por un clásico bistrot francés o por probar las deliciosas ostras en el mercado de Les Halles. Si prefieres algo más informal, los bares de tapas y pintxos ofrecen una opción deliciosa y rápida.
Compras y relax
Después de comer, es el momento perfecto para perderse por las calles del centro. Biarritz cuenta con una gran variedad de boutiques elegantes, tiendas de diseño y chocolaterías artesanales. Si te apetece relajarte, un plan perfecto es visitar el Hôtel du Palais, el antiguo palacio de la emperatriz Eugenia, o disfrutar de un tratamiento en uno de los famosos spas de la ciudad.
Regreso a Bilbao con la sensación de haber viajado lejos
Tras un día lleno de experiencias, toca regresar a Bilbao con la sensación de haber viajado mucho más lejos de lo que realmente has ido. Biarritz es ese destino cercano que combina el encanto francés con la esencia euskaldun, convirtiéndolo en una escapada ideal para un día inolvidable.