‘Aliados’, contraespionaje y amor en la guerra

Entre los escenarios escogidos para revivir el Marruecos de la Segunda Guerra Mundial se encuentran varios rincones de las islas Canarias, la zona portuaria de Gran Canaria o la isla de Fuerteventura. Tras participar en Malditos bastardos o Corazones de acero, también ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, Brad Pitt se pone al frente del reparto de una cuidada producción que incluye efectos visuales muy vinculados a la trayectoria de Zemeckis. El propio director ha declarado que en la película se descubren homenajes a clásicos como Lawrence de Arabia, filme de David Lean de 1962: “Cuando estábamos rodando en las dunas de arena, estaba copiando a David Lean”, declaró en su estreno en Estados Unidos.

La historia de Aliados une a Marianne Beausejour y Max Vatan, una guerrillera francesa (Marion Cotillard) y un espía norteamericano (Brad Pitt) que tienen que hacerse pasar por un feliz matrimonio para infiltrarse en la filas enemigas. Durante la misión, que transcurre en el norte de África, los dos se acaban enamorando. La feliz pareja parece que inicia una vida feliz en Inglaterra, tienen un bebé pero todo se complicará cuando a Vatan le aseguran que Marianne es una agente doble que trabaja para los nazis.

Estamos ante una película trepidante como Sr. y Sra. Smith, protagonizada por el propio Pitt y Angelina Jolie en 2005, donde las emociones y la relación entre los protagonistas buscan ser ahora más relevantes que la acción. Robert Zemeckis suena como firme candidato para los Globos de Oro por Aliados, un nuevo reto para el autor de filmes míticos como Regreso al pasado (1985) o Forrest Gump (1994), galardonada con seis premios Oscar, entre ellos el de mejor película, mejor director o mejor actor para Tom Hanks. En su nueva producción, vuelve a trabajar con Alan Silvestri, su compositor de cabecera, y el guionista británico Steven Knight, quien estuvo nominado para el Oscar por Negocios ocultos (2002) y autor de Promesas del Este (2007) .