No fueron desconocidos: destapan lo que pasó realmente en la "brutal agresión" a un menor en Torrelavega
La Policía descubre que contaron esta versión para proteger al amigo que lanzó la piedra que dio en la cara al herido, que fue ingresado
La Policía Nacional ha esclarecido que el fuerte impacto de una piedra en la cara sufrido por un menor de edad el mes pasado en Ganzo (Torrelavega) resultó ser fruto de un juego entre amigos y no de una agresión por parte de unos desconocidos como se había denunciado.
Los hechos ocurrieron el 18 de octubre y llevaron al menor a ser ingresado en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla por las lesiones, de modo que al día siguiente el padre del herido acudió a la Comisaría de Policía de Torrelavega y relató la versión que previamente le había contado su hijo.
Éste indicó que caminaba con unos amigos por la zona del apeadero de tren de Ganzo cuando unos chicos desconocidos que iban por detrás les lanzaron piedras, y una de ellas le dio en la cara. Así, la Policía Nacional inició una investigación para esclarecer los hechos e identificar a los denunciados.
Un juego entre amigos
Sin embargo, las diligencias practicadas por los investigadores, que partían de este relato, concluyeron que las lesiones denunciadas habían sido ocasionadas fortuitamente durante un juego entre la víctima y sus amigos, y no por parte de terceras personas.
Y es que los menores se personaron en dependencias de la Policía Nacional y, tras recapacitar sobre lo ocurrido, reconocieron a los agentes que todo había sido fruto de un juego entre ellos y que no hubo agresión de desconocidos.
La investigación permitió constatar que el menor y sus amigos estaban jugando cerca de una bolera con el suelo de gravilla cuando, de forma inocente, uno de ellos lanzó una piedra. Otro de los jóvenes, interpretando el gesto como un juego, recogió varias piedras de la vía, se las arrojó y una de ellas impactó accidentalmente en la cara del menor.
Hospitalización
Alarmados por la herida, los amigos avisaron a la madre del herido y ésta se acercó al lugar, le recogió y le trasladó al Hospital de Sierrallana, donde posteriormente fue derivado a Valdecilla y allí fue ingresado para tratar las lesiones que presentaba.
Antes de que llegara la madre, los menores debatieron distintas versiones para justificar lo ocurrido durante el juego y proteger al amigo que había lanzado la piedra que impactó en la cara del herido, para evitar que tuviera problemas. Finalmente, decidieron imputar la autoría a unos jóvenes desconocidos y contar que les habían agredido lanzándoles piedras.
La Policía Nacional explica que el afán por proteger al amigo dio lugar a una denuncia con un relato de los hechos que no se correspondía con la realidad, y generó "cierta alarma social y repercusión en medios y redes sociales".