Belén Rico, la hija del abuelo que murió tras ser agredido en un partido de balonmano que su nieto de 16 años arbitraba, ha hecho pública una dura carta en redes sociales en la que lamenta la muerte de su padre. Andrés presenciaba como espectador un encuentro de categoría cadete en Sanxenxo el pasado 15 de diciembre de 2024 cuando sufrió una caída al ser empujado por el padre de una jugadora. Tras pasar más de dos meses ingresado en un centro hospitalario falleció en la madrugada de lunes al no poder superar las lesiones sufridas.

"Maldito el momento en que nuestro mundo se paró, maldita esa persona que no debería allí, maldito el momento en que dejaste de ser tú, maldito empujón, maldito el momento en que él se cruzó en nuestras vidas y nos hizo perder el control de ellas en una espiral de lágrimas y dolor que solo le deseo que sufra como nosotros", escribió la hija de la víctima en una carta de la que advierte que "no le tiene que gustar a todo el mundo".

En una dura carta Belén Rico, hija de Andrés, explica que a ella "no le vale con ningún perdón, con ninguna terapia" y asegura que tampoco cuenta con la Justicia. "Vete lejos donde no tengamos que cruzarnos nunca más", continúa.

La hija también tiene palabras de recuerdo para su padre fallecido. "Mi padre fue un hijo que cuidó a sus padres ante todo, que estuvo ahí para su hermano y familia, que mantenía la unión entre todos. Fue un marido y compañero de vida maravilloso y un padre con el que siempre pude contar para todo."

"Perdón por llegar tarde"

La Federación Galega de Balonmán también trasladó en redes sociales su "impotencia e indignación" y lamentó no haber sido capaz de "impedir el fatídico suceso".

"Perdón por llegar tarde, perdón por no avisar y por no haber sido capaces de transmitir de manera eficiente que sin respeto nada de esto tiene sentido", señala la carta, que también pide disculpas por "no lograr que quien legisla y regula, por lo menos intuya que lo que hay no llega".

"Perdón por el despropósito de quien provocó tu partida aún tenga más que decir y siga haciendo vida normal, perdón por todas esas personas que no ven el problema porque no le tocó de cerca, perdón por no ser capaces de impedir tu viaje", apunta el texto.

La misiva también da las "gracias" por haber permitido conocer a la "estupenda y unida" familia del fallecido y ser "un ejemplo" para promover lo que "el balonmano debería sembrar".

"Gracias por estar ahí Andrés, gracias porque sabemos que, aunque no te veamos en nuestros pabellones, siempre estarás con nosotros", finaliza la carta que traslada su pesar a la familia de parte de todo el balomnano gallego.