Poco después de la una del mediodía de este viernes varios agentes de la ertzaintza accedían al interior de una lonja de Sestao donde fue hallado el cuerpo sin vida de un hombre de 41 años. Fue su propia madre quien alertó a los servicios de Emergencia que rápidamente movilizaron a varios equipos. En una primera inspección ocular no se encontraron indicios de criminalidad. El cadáver, tal y como informaron fuentes del Deparrtamento de Seguridad del Gobierno vasco, fue trasladado al Instituto de Patología Forense con objeto de ser examinado y poder determinar con exactitud las causas del fallecimiento.