BILBAO - In fraganti. Así pilló la Ertzaintza a un hombre de 27 años que se había colado en el almacén del bar donde había trabajado con anterioridad en Santurtzi para apropiarse de diverso material almacenado. Los hechos ocurrieron la madrugada de ayer en un establecimiento hostelero del municipio marinero.
Según informó el departamento vasco de Seguridad, una patrulla no uniformada se encontraba en labores de reconocimiento cuando, a las 00.10 horas observó que la puerta que daba acceso a unos trasteros del local estaba abierta. Y, al ir a comprobarlo, vio que el detenido intentaba abandonar el almacén cargado con varios productos de alimentación y bebidas. Al ver a los er-tzainas, el sospechoso intentó volver al interior, pero los agentes le hicieron salir e identificarse. Ante sus preguntas insistentes, terminó confesando que había cogido género del bar en el que tiempo atrás había trabajado, y que para acceder al mismo había utilizado un juego de llaves del local, ya que tenía una copia en su poder. En el pasillo de acceso al almacén, los agentes encontraron varias cajas de bebidas y alimentos apiladas.
Ante esta evidencias, la Er-tzaintza avisó al propietario del almacén, quien confirmó posteriormente que el detenido había trabajado para él. Asimismo, confirmó a los agentes que desde hace tiempo echaba en falta material de este mismo almacén.
Así las cosas, la Ertzaintza procedió a detener al joven acusado de un delito de robo. Asimismo, los agentes se incautaron de un juego de llaves pertenecientes a la puerta principal y a varios trasteros. - DEIA