Bilbao

MIrando las fotos entran ganas de separarse y volver a casarse. Parejas casi licuadas en Ereaga, matrimonios recién inaugurados acunados en tablas de surf por el agua, novias que se funden con el mar y novios derretidos. Fotografías que escapan del convencionalismo, dinamitan los tópicos y sitúan los tradicionales reportajes de boda a años luz de este instante perfecto. Un instante con premio como el que ha logrado el estudio de fotografía bilbaino Fotogenia Digital, que acaba de hacerse con el primer galardón en la categoría de bodas del concurso International Photography Awards (IPA) 2011, considerado por muchos como el Oscar de la fotografía. La imagen ganadora, la boda de Arantza y Kike, también derrocha pasión aunque tampoco sea una foto al uso. Se trata de una instantánea tomada por Silvia Encinas en un restaurante de Getxo con el padrino como protagonista de relumbrón de una gran boda vasca.

Cuando una imagen vale más que mil palabras se retratan colas radiantes que se fusionan con el exterior del Guggenheim, vestidos que moldean las columnas de la Alhóndiga, novias que guiñan un ojo al cielo junto a las grúas de Olabeaga, arañas gigantes que se tragan a los contrayentes y parejas que saltan a calentar al césped de San Mamés. Y los novios siempre en un segundo plano, disueltos, ablandados, emocionados y ajenos a lo que les deparará la vida marital. Una galería de paraísos artificiales para hacer del día más feliz de tu vida una obra de arte alejada del lanzamiento indiscriminado de arroz.

espontáneos y modernos Los profesionales Eugenio Hernández, Silvia Encinas e Iñigo Sierra componen este equipo que trabaja con la vocación de retratar a las personas de forma cercana y próxima en un entorno natural. "Intentamos plasmar el día de una boda de una forma espontánea y moderna", aseguran. Y lo consiguen. Porque producen instantáneas mágicas que van mucho más allá de hacer click con una cámara.

Iluminación, localización y mucha maestría con todo el equipo a cuestas. "Pasamos con los novios todo el día de la boda. Además, en muchas ocasiones, otras de las fotos son fruto de una segunda jornada. Porque así, ya más tranquilos, les podemos sacar en la playa, en un acantilado... Todo depende de si ellos nos dan más o menos juego. A veces saben posar y otras no, algunos son más espontáneos, se enganchan y se lanzan a hacer una pirueta en el aire. Eso es genial. Pero, sobre todo, lo que intentamos es que sea un día especial, que se lo pasen bien, porque bastante nerviosos están ya como para decirles ponte aquí o allí", explica Silvia Encinas, la autora de la foto premiada.

Este certamen -donde el estudio bilbaino se ha erigido como ganador en la especialidad de bodas-, se denomina The Lucie Awards y es considerado por muchos profesionales como el Oscar de la fotografía en Estados Unidos. La ceremonia de entrega de premios se celebrará en el centro de artes escénicas Lincoln Center de Nueva York.

Una ceremonia a la que no faltará Fotogenia Digital, una empresa afincada en Bilbao con una filosofía muy personal a la hora de enfrentarse a sus trabajos, ya que la firma ofrece una combinación de juventud y experiencia decisiva cuando se trata de plasmar las necesidades de los contrayentes en imágenes. "Hacemos reportajes a novios con estilos muy diferentes. Nos tenemos que amoldar a parejas muy extrovertidas y a otras muy clásicas. Antes de la boda hablamos con ellos para dar forma a ese día y que quede muy claro qué esperan. Por eso hay fotos más clásicas, más románticas o más divertidas y pícaras", afirma una Silvia Encinas que está convencida de que el premio aporta, en principio, solo prestigio. "Aunque si hubiera pasta de por medio te aseguro que me alegraría muchísimo", ironiza.

Hablando de dinero, hacer un álbum lleno de ingenio y creatividad no está por encima del coste medio. "Además damos muchísimas facilidades a los novios, si quieren un álbum con muchas fotos, con pocas, ellos eligen...", indica la componente de un equipo que además de estar especializado en el reportaje de boda, no olvida la fotografía publicitaria. De hecho, el premio consolida la trayectoria de este estudio, que inició su actividad en 2006, y que cuenta con galardones internacionales en reportajes sociales y con más de una quincena de reconocimientos y menciones.