La manifestación que recorrió ayer domingo las calles de Barcelona para exigir que se aplique la cuota del 25% del castellano en las aulas solo pudo movilizar a 2.800 personas a pesar del despliegue de cargos del PP (con la excepción de su presidente, Alberto Núñez Feijóo, que quiso evitar otra foto de Colón), Vox y Ciudadanos. Dirigentes de los tres partidos apoyaron con su presencia la manifestación convocada por Escuela de Todos contra lo que consideran una política lingüística “represora e intimidante” de la Generalitat. Las cifras ofrecidas por la Guardia Urbana, de 2.800 personas, palidecen frente a las 150.000 que contabilizó ese mismo Cuerpo en la marcha de la Diada. Los organizadores, en cambio, hablaron de 200.000 en defensa del castellano. Frente a esta foto se encuentra el amplio consenso político de ERC, Junts, PSC y los comunes sobre la nueva ley del catalán.

La marcha arrancó sobre las 12:30 horas desde el Arco de Triunfo encabezada por una gran pancarta con el lema español, lengua vehicular, y que un poco más atrás tenía su versión en catalán, el castellà, també llengua vehicular. Un camión amenizó el trayecto con temas musicales. Entre los dirigentes políticos en la cabecera destacaban la secretaria general del PP y portavoz en el Congreso, Cuca Gamarra; las diputadas populares en la Cámara Baja y en el Parlamento Europeo, Cayetana Álvarez de Toledo y Dolors Montserrat; y la líder de C’s, Inés Arrimadas. Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, se colocó entre los manifestantes. Gamarra acusó al Gobierno español de hacer “dejación de funciones” para seguir gobernando con el apoyo del nacionalismo catalán.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, aseguró desde la XXV Interparlamentaria en Toledo tras las críticas por no haber acudido que recurrirá a todas las herramientas del Estado de Derecho para garantizar la “cordialidad” entre ambas lenguas. En ese sentido, pareció marcar un perfil propio defendiendo ambas lenguas. Abascal, defenderá aplicar el artículo 155.

SIN EL PADRE DE CANET DE MAR

La presidenta de la asociación S'ha Acabat!, Júlia Calvet, leyó un manifiesto donde habló de la “arrogante y permanente desobediencia” a la Constitución y a las resoluciones judiciales de las que supuestamente “hace gala” la Generalitat. El presidente de Impulso Ciudadano, José Domingo, leyó unas palabras de apoyo escritas por el padre del niño de Canet de Mar que solicitó que se impartiera parte de la educación de su hijo en castellano, y que ayer no participó.

El Tribunal Superior de Catalunya suspendió la aplicación del 25% a la espera de que el Tribunal Constitucional decida sobre la nueva legislación aprobada en el territorio.