El ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha asegurado este lunes que "respeta" los recelos que ha levantado la nueva Ley de Secretos, aunque confía en que al final esta norma cuente finalmente con una "mayoría parlamentaria rotunda", abriéndose a mejorar el texto durante su tramitación.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha dado luz verde al anteproyecto de la Ley de Información Clasificada, Bolaños ha sido preguntado por las quejas que ha generado el texto en sus socios de Unidas Podemos y en aliados parlamentarios como PNV, Bildu o Más País, especialmente por la opción de mantener bajo secreto 50 años determinados documentos confidenciales.

En este contexto, Bolaños ha asegurado que el Gobierno "estudiará" todas las aportaciones de los grupos, una vez se haga público el texto, con la intención de "mejorar" la norma, tanto en la tramitación dentro del propio Consejo de Ministros como en las Cortes Generales.

"Habrá una mayoría parlamentaria rotunda", ha proclamado Bolaños, que tiene como previsión que esta ley pueda estar aprobada a finales de este año o a principios de 2023.