BILBAO - La izquierda abertzale y Etxerat culparon ayer a la “política penitenciaria de excepción y al PP” de la muerte de Xabier Rey, a quien quieren despedir “en paz y con dignidad”, por lo que pidieron a los populares que, “ya que no respetan a los vivos, al menos respeten a los muertos”. La postura de la izquierda abertzale ante el presunto suicido del preso de ETA Xabier Rey Urmeneta en el centro penitenciario Puerto III, en Cádiz, fue expuesta en Iruñea por el secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, acompañado por Rufi Etxeberria (Sortu), Lur Albizu eta Mikel Urdangarin (Ernai) e Igor Arroyo y Rosa Iriarte (LAB).

El preso, de 38 años y vecino del barrio iruindarra de Donibane, y que cumplía condena en primer grado desde 2008, fue encontrado con cortes de las venas a la altura de los codos y antebrazos, según fuentes penitenciarias del Ministerio del Interior. “Que sea el último muerto por la política penitenciaria criminal del PP”, señalaron en el acto, donde apuntaron que estos momentos de “duelo” deben ser momentos para la reflexión ya que esta muerte “no ha sido natural”. “Xabi no se ha muerto, lo han matado”, zanjaron.

En este sentido, destacaron que durante su detención “sufrió crueles torturas, fue alejado a mil kilómetros de casa, fue aislado, en primer grado, obligado a permanecer 22 encerrado en la celda”, tras lo que reprocharon que “fue condenado a través de la autoinculpación obtenida bajo torturas” y por tanto “no debería estar en la cárcel”. Y precisaron que si no se hubiera mantenido esta política penitenciaria “criminal”, quizás hubiera estado en la calle, o con permisos y en tercer grado, por lo que “quizás no se hubiera visto obligado a hacer lo que ha hecho en un acto de desesperación”.

Por todo ello, la izquierda abertzale exigió la “revisión de todas las condenas fundamentadas en inculpaciones bajo torturas”, e instó a “acabar con la actual política penitenciaria y establecer una hoja de ruta para acabar con el alejamiento, el primer grado y todas las medidas de excepción”. Igualmente, cuestionó que se esté “tratando de imponer un relato de vencedores y vencidos, de justos e injustos, de buenos y malos”, ya que “sobre esas premisas no existe solución”. “Que no utilicen el ámbito de las víctimas para la confrontación política”. Además, llamaron a participar en las movilizaciones que se celebraron a la tarde en pueblos y barrios, y en la manifestación para el sábado a partir de las 17.00 horas en la capital navarra.

La izquierda abertzale anunció su intención de reunirse con otros agentes, entre los que no incluye al PP, para realizar diferentes acciones conjuntas tanto de manera institucional como social “contra el alejamiento y la política penitenciaria”

Por su lado, Etxerat también achacó esta muerte a “la política penitenciaria aniquiladora de excepción del Estado español”. El colectivo de familiares de presos de ETA dijo que la de Rey es “una muerte que se podía haber evitado pero no han querido”. Según censuraron, “se cumplen más de seis años del cese definitivo de la actividad armada de ETA y un año desde su desarme, pero los familiares y allegados de los presos y exiliados políticos vascos, y los propios presos, seguimos sin poder hablar en pasado del sufrimiento y el dolor de las medidas de excepción de la política penitenciaria”. Etxerat pregunta si “no es cruel hasta el extremo mantener a la práctica totalidad de los presos políticos vascos en primer grado, en régimen cerrado, de forma colectiva y por tiempo indefinido”.

gobierno navarro En paralelo, El Gobierno navarro que preside Uxue Barkos defendió el fin de la dispersión de los presos de ETA. La portavoz del Ejecutivo foral, María Solana, indicó que “ya nos hemos posicionado en otras ocasiones “en contra” de “las políticas y medidas de excepción que a día de hoy se siguen manteniendo” en el ámbito penitenciario. - DEIA