BARCELONa. El Govern de Catalunya denunció ayer la visión "imperialista" de Gregorio Peces-Barba al referirse en tono irónico a los bombardeos de Barcelona, que ha recibido las críticas unánimes de todos los partidos, mientras el catedrático se disculpaba por la "broma". Entre las críticas, sobresalió la del representante de ERC Joan Tardà, que tildó al abogado de "enorme hijo de puta".

Peces-Barba, uno de los padres de la Constitución, manifestó el jueves que quizá a España le hubiera ido mejor si se hubiera "quedado con los portugueses y hubiera dejado que se vayan los catalanes". También afirmó que no era pesimista respecto a la unidad de España: "Estaremos en mejores condiciones que en otras épocas. No sé cuántas veces hubo que bombardear Barcelona. (...) Creo que esta vez se resolverá sin necesidad de bombardear Barcelona".

Estos comentarios fueron muy criticados desde las instituciones catalanas, partidos y otras entidades, hasta el punto de que el portavoz del Gobierno de la Generalitat, Francesc Homs, denunció la visión "imperialista" que destilan las palabras de Peces-Barba, al tratar a Catalunya como si fuese una "colonia".

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, reprobó también estas declaraciones e invitó a "repudiar a padres que te quieren mal", en referencia al hecho de que Peces-Barba sea uno de los "padres" de la Constitución. Por su parte, en un mensaje aparecido en la red Twitter, el republicano Joan Tardà afirmó que "las palabras de Peces-Barba sobre los bombardeos de Barcelona sólo pueden responder a maldad y, dicho en nombre de las víctimas, a ser un enorme hijo de puta"; posteriormente puntualizó que "en ningún momento he querido ofender a la madre de este señor".

El expresidente del Congreso admitió que sus declaraciones no fueron afortunadas. "Me he equivocado. Yo no le daba ninguna importancia, no he valorado la sensibilidad en ese tema y lo siento muchísimo", subrayó.