bilbao. Patxi López se apunta al pacto anti Bildu lanzado en primera instancia por el PP e insta también al PNV a que se sume a la iniciativa "por el bien del país" para impedir que la coalición formada por EA, Alternatiba e independientes de la izquierda abertzale logre el gobierno en instituciones municipales y forales.

En su primera comparecencia ante la prensa tras los comicios municipales y forales del pasado domingo, en los que el PSE sufrió un tremendo revés, el lehendakari y secretario general de los socialistas vascos abogó por un acuerdo a tres bandas -PNV, PSE y PP- con el fin de evitar que Bildu acceda a la presidencia de instituciones municipales y forales, especialmente la Diputación de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Donostia. Según López, la coalición "está en contra de todos los proyectos estratégicos", por lo que incidió en la necesidad de cortar el paso a Bildu a las principales instituciones. "Cualquier acuerdo que suponga darles responsabilidad institucional supondría la paralización de Euskadi y ello sería un error de bulto contra el país", apostilló.

Horas antes de la declaración de López, fue el PP quien hizo oficial el ofrecimiento que el pasado domingo, nada más conocerse el resultado de los comicios, lanzó Borja Semper, presidente de los populares guipuzcoanos. La formación de Antonio Basagoiti ofrece a PNV y PSE un "gran acuerdo para la estabilidad, la exigencia democrática y para la creación de empleo y recuperación de confianza en todo el País Vasco". Iñaki Oyarzábal fue el encargado de oficializar la oferta con la que, según explicó el secretario general del PP en la CAV, se trata de evitar que "las instituciones no queden al pairo de los más radicales de este país que quieren parar nuestro progreso y la actividad económica".

Y es que, la irrupción de Bildu, especialmente en Gipuzkoa, ha trastocado el panorama político y, en opinión de Oyarzábal, ha llevado a la zozobra a pequeños y medianos empresarios guipuzcoanos, "que ahora ven un futuro cargado de incertidumbres".

La propuesta del PP, aunque en un principio tiene como destinatarios tanto a socialistas y jeltzales, se trata de un emplazamiento directo al partido liderado por Iñigo Urkullu, a quien Oyarzábal instó a "actuar con responsabilidad y pensar en todos los vascos y no en los intereses partidistas". "Es el momento de actuar ya que los ciudadanos, especialmente en Gipuzkoa, ven en este momento un futuro cargado de incertidumbres", apostilló.

Iñaki Oyarzábal puso a disposición de PNV y PSE los votos del PP, "allá donde hagan falta para dar estabilidad a las instituciones". Según señaló, "no se trata de formalizar una coalición a tres bandas, sino de una disposición clara al entendimiento y el diálogo".

En el acuerdo que fomenta el PP, los tres partidos se posicionarían en favor de la formación más votada de ellas en cada institución, por lo que la Diputación de Gipuzkoa sería para el PNV, el Ayuntamiento de Donostia para el PSE y la Diputación de Araba y el Ayuntamiento de Gasteiz para el PP.