Interior refuerza el núcleo crítico al acercar a Valentín Lasarte a Langraitz

bilbao. El Ministerio del Interior insiste en su política penitenciaria de congregar en cárceles próximas a Euskadi a aquellos presos que mantienen posturas críticas con la dirección de ETA con el traslado a la prisión alavesa de Langraitz de Valentín Lasarte Oliden, quien desde hace años viene escenificando sus divergencias con la disciplina de la organización armada.

Lasarte Oliden, de 47 años, fue detenido por la Ertzaintza el 25 de marzo de 1996 cuando formaba parte del comando Donosti. Hasta entonces había sido un miembro muy activo de la organización armada, por lo que fue condenado a 370 años de prisión por su participación en siete asesinatos, entre ellos los del dirigente del PP Gregorio Ordóñez, el político socialista Fernando Múgica Herzog y el sargento de la Policía Municipal Alfonso Morcillo.

En los últimos años, Valentín Lasarte comenzó a distanciarse de ETA, por lo que a mediados de 2009 fue trasladado a la prisión de Villabona, en Asturias, donde fue uno de los dos primeros activistas de la banda en solicitar un trabajo remunerado dentro de la cárcel, algo prohibido por las directrices de la organización armada. Obtuvo un trabajo en el economato con una retribución de la que le descontaban una cantidad para hacer frente a las indemnizaciones pendientes.

La decisión de Lasarte y de Iñaki Rekarte, el segundo recluso que solicitó trabajo, fue muy mal acogida por la mayoría de los presos de la banda alineados con la postura oficial. Algunos de estos últimos tuvieron que ser cambiados de módulo para evitar las presiones que estaban aplicando a los dos disidentes. Desde prisión, Lasarte mantuvo una relación estrecha con algunos de los cabecillas del sector crítico de los presos, como Kepa Pikabea. Su evolución llevó a los responsables penitenciarios a trasladarlo a la prisión cántabra de El Dueso, donde ha estado durante los últimos meses, antes de ser acercado a Langraitz.

Antes de que se diera este movimiento, Lasarte rompió oficialmente con ETA y suscribió escritos de renuncia a la violencia, de reconocimiento de sus responsabilidades y petición de perdón a las víctimas. En el caso contrario se encuentra el abogado Txema Matanzas, a quien Instituciones Penitenciarias ha trasladado a Cádiz tras comprobar que su presunto acercamiento a las tesis posibilistas no era tal.

contrario a la violencia Por otra parte, los tres presuntos autores de unas pintadas contra el TAV en un tranvía de Bilbao el 9 de julio de 2009, negaron ayer en la Audiencia Nacional haber participado en los hechos y pertenecer a la organización juvenil ilegalizada Segi. Uno de los acusados, además de rechazar que conociera al resto de implicados y de señalar que solo estaba esperando a unos amigos, se declaró contrario a la violencia. Su defensa remarcó que su cliente no se corresponde con la descripción que un ertzaina fuera de servicio que fue testigo de los hechos dio de los dos hombres que participaron en el ataque.