málaga. El expresidente del Gobierno español destacó ayer, respecto a si el actual inquilino de La Moncloa, José Luis Rodríguez Zapatero, repetirá como candidato en las próximas elecciones generales, que, aunque existe libertad para decir si se quiere aspirar a ello, "serlo depende del funcionamiento democrático y orgánico de la estructura del partido". "Es algo tan obvio que se olvida con frecuencia", manifestó Felipe González, que presentó en Málaga a la candidata del PSOE a la alcaldía de la capital, María Gámez, durante un desayuno informativo, añadiendo que "la libertad personal no siempre se puede ejercer cuando se tiene un compromiso político porque pueden no dejártela ejercer".

El exsecretario general del Partido Socialista indicó que "decir no tiene exactamente el mismo número de letras que , pero uno tiene libertad para decir no y no tiene libertad para decir con todas las consecuencias", declaró González, antes de añadir que éstas últimas "dependen de un colectivo humano democrático que decida". Según el expresidente español, "la libertad de una persona que ejerce el liderazgo sólo es plena con el límite de la responsabilidad para decir que no es candidato".

Cuestionado por la posibilidad de que el vicepresidente del Gobierno español y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, fuera el próximo candidato socialista a las elecciones generales de 2012, González indicó que "es un todoterreno de la política, lo mismo va por un camino rural que por una autopista, y circula bien". No obstante, rechazó las declaraciones de quienes creen que las funciones que ejerce en la actualidad el número dos de Zapatero evidencian que ya está sustituyendo al presidente del Gobierno español, "que hace de Reina Madre". "Estamos banalizando demasiado", criticó, agregando que esos comentarios no se hacían cuando María Teresa Fernández de la Vega era vicepresidenta primera del Ejecutivo español, por tanto, los de ahora "tienen alguna carga intencional".

Ante esta situación, el expresidente español pidió que se recupere la sensatez, en tanto que "éstos no son los problemas de nuestro país". Eso sí, González afirmó que no cree "en la historia de que por ser joven se presenta la renovación", ya que "conozco a jóvenes muy viejos y a viejos que se mantienen jóvenes porque mantienen rebeldía consigo mismo, por tanto, no es un problema estrictamente de edad".

visita de estado Además, el ex jefe del Ejecutivo español insistió en que no va a volver a ninguna representación institucional, "ni aquí ni fuera": "Espero que a los 48 años de haber dicho que no volveré la gente lo crea". Durante su intervención, González quiso dejar claro también que "un jefe del Estado no puede ir en visita oficial a una autonomía, porque es su propio país". "Los dirigentes van donde crean que tienen que ir", apuntó.

González también abogó por el desarrollo de reformas para combatir la crisis económica y afirmó que, "con la edad que tengo, que gane la derecha o tal no me va a quitar el sueño, sino que gane sin decir nada y sin proponer nada y sin saber qué hacer con este país". El exsecretario general del PSOE subrayó que "necesitamos reformas, malditas reformas que necesitamos", pero advirtió de que "no van a ser aceptables socialmente si no arreglamos el funcionamiento irregular del sistema financiero global, si no hacemos que funcionen con reglas que sean conocibles, homogéneas y homologables para todos".

Insistió en que "hay que abrir una vía de esperanza" y para ello son necesarias las reformas y "reconocer que somos pocos productivos y que nuestra competitividad es escasa". "Es algo de sentido común, no es de derechas ni de izquierdas ni de pensionistas", apostilló.

González hizo referencia a la reforma del sistema de pensiones, diciendo que "sólo la van a tomar en serio los que creen en un sistema público solidario".