Un expreso de Cardiff en la Gran Vía
Jake Heyward es una de las estrellas de la Milla Internacional de Bilbao
LA victoria, tesoro oculto para muchos atletas, es una rutina para Jake Heyward (Cardiff, 1999). En su corta trayectoria, las carreras ganadas no se pueden contar con los dedos de la mano. Vive en un idilio constante con el triunfo. Es su costumbre y también su obsesión. Ni los títulos pasados, ni la situación en la que se encuentra en ese momento le importan al galés cuando se calza las zapatillas y la pistola retumba para dar la salida. Mirada al frente y un único objetivo en la cabeza: ganar. Heyward solo sabe correr para ganar y hacerlo a su modo, marcando el ritmo de la carrera desde el principio hasta el final. Dominar en cada metro. Con solo 18 años ya se codea con los atletas de élite y hoy será una de las estrellas de la Milla Internacional de Bilbao, que arranca a las 13.20 horas y contará con un elenco de estrellas donde destacan, además del británico, Adel Mechaal o David Bustos.
Heyward es la gran promesa del atletismo británico, pero todavía le falta un pequeño salto de nivel para estar a la altura de los mejores. En Bilbao no será el favorito, pero el mediofondista de Cardiff no saldrá cohibido. “En todas las carreras a las que voy intento ganar, aunque tenga un uno por ciento de posibilidades. Intentaré ganar en Bilbao, con ese objetivo vengo”, afirma. Aunque, como en las carreras que compite, sabe que su trayectoria no es una explosión rápida. Sabe que el trabajo es largo y también ve la carrera bilbaina como una prueba perfecta para mejorar: “Estoy realmente entusiasmado. Debido a mi edad no he competido muchas veces a este nivel y esta es una gran oportunidad para medirme a rivales de un nivel tan alto”. La carrera de hoy será la primera milla para Heyward, que aunque apenas corre fuera del tartán “estoy deseando participar y seguro que será divertido. Además, Bilbao me está pareciendo espectacular”.
La Milla Internacional de Bilbao ofrece la oportunidad de ver a una de las grandes promesas del atletismo internacional. Heyward domina con mano de hierro su categoría y a cada carrera que va es siempre el favorito. El galés es la gran promesa del Reino Unido después de ser campeón de Europa de 1.500 metros consecutivamente en cadete, juvenil y sub’20. Expectativas tremendas para un joven que apenas acaba de comenzar sus estudios universitarios. “Creo que llevo bastante bien la presión, no me afecta demasiado. Realmente estoy entusiasmado con lo que estoy viviendo y me encanta competir. En las carreras también hay presión, pero sea el favorito o no, tengo el mismo objetivo, que es simplemente ganar la carrera”, cuenta.
Piernas rápidas y estrategia valiente, incluso temeraria a la hora de competir. Ese es el Heyward corredor, pero cuando sale del tartán y sus pulsaciones bajan, se muestra cauteloso y no tiene prisa por llegar a las cotas más altas. Más premura muestra la prensa británica. El mayor talento galés de la historia, El nuevo Sir Sebastian Coe? son algunos de los titulares publicados sobre Heyward. “Son cumplidos enormes, pero debo seguir trabajando duro y mantenerme centrado”, afirma. Las comparaciones con Sebastian Coe son muy habituales, el atletismo británico quiere un nuevo héroe, pero el mediofondista le quita hierro al asunto y se lo toma con calma: “Que te comparen con él es una sensación increíble, pero yo quiero hacer mi propia carrera. Mis logros no se puede comparar con los de Sir Sebastian Coe, es lógico. Aunque es una buena manera de motivarme y es bonito ver que los británicos confían en mí”.
“ambicioso” Esa calma a la hora de hablar no borra ni una pizca de su ambición. Siempre quiere más y no duda en reconocer que “soy tremendamente ambicioso”. Su carrera se ha movido al mismo ritmo que sus piernas y las épocas de flores han sido mucho más habituales que las de espinas. Sin embargo, Heyward no quiere quedarse ahí: “He trabajado muchísimo y todo ha ido muy rápido. Tengo que seguir trabajando así, ser consistente y estar sano. Todo tiene que ir junto”. A la hora de mirar al futuro sus posibilidades son enormes y sus deseos están llenos de ambición. “Me gustaría conseguir una medalla a nivel mundial. Es un sueño, pero también algo realista”, afirma. Bilbao será uno de los primeros pasos en el campo absoluto de este galés insaciable de triunfos.