Síguenos en redes sociales:

Riesgo cero en la Herri Krosa

El doctor Iñaki Iñigo ejerce de médico de la carrera patrocinada por DEIA desde la primera de las 29 ediciones

Riesgo cero en la Herri KrosaJosé Mari Martínez

LA Herri Krosa es atletismo y diversión. Miles de personas recorriendo el trazado de diez kilómetros que se ha convertido en un clásico del tercer domingo de noviembre en Bilbao. En la prueba patrocinada por DEIA, que arranca hoy a las 11.00 horas en la Gran Vía, la competición queda en un segundo plano y lo importante es disfrutar. Para ello es indispensable que el riesgo de lesiones sea mínimo, prácticamente cero, y que cuando ocurren los inevitables imprevistos, un grupo de responsables llegue al lugar lo antes posible. Iñaki Iñigo es el médico del evento y uno de los encargados de organizar todo el sistema sanitario, coordinando el sistema de ambulancias, colaborando con la Cruz Roja y estando al pie del cañón para atender cualquier problema.

La experiencia es un grado y a la hora de coordinar el sistema sanitario se nota. “Llevamos desde la primera edición y lo tenemos bastante trillado, además la Cruz Roja nos ayuda mucho al poner un hospital de campaña y realizar otras muchas cosas. Luego, nos conocemos todos desde hace tiempo y eso ayuda a que no haya ningún problema”, cuenta Iñigo. Para que todo funcione hay muchas personas que están atentas durante toda la mañana. Responsables invisibles que aparecen cuando se les necesita, siempre procurando llamar lo mínimo la atención para que el corredor se sienta seguro y pueda correr sin preocupaciones. “Si hay traslados en ambulancia, procuramos que sean sin sirenas y por fuera de la carrera para que la gente no se asuste”, añade el médico.

Los problemas suelen ser anecdóticos dentro de la Herri Krosa y, por ejemplo, “el año pasado solo tuvimos tres o cuatro incidentes”. A pesar de eso, saben que la aglomeración de gente, se prevén unos 7.500 corredores, hace inevitables las caídas y alguno de los afectados puede sufrir una lesión mayor que las habituales rozaduras. “No hemos tenido grandes problemas, pero sí esguinces, ampollas y gente víctima del cansancio”, declara Iñigo, que afirma que “nunca hemos tenido ningún problema coronario”. Sin embargo, no se puede dejar nada al azar y por ello tienen todo preparado por si sucede algún infarto: “Tenemos detrás un hospital que está preparado por si ocurre cualquier cosa”.

A pesar de todo, Iñigo aconseja a la gente que sea prudente. En la Herri Krosa no hace falta pasar primero la línea de meta para ganar, ese no es el espíritu de la prueba. Lo importante es disfrutar de una mañana corriendo por las calles bilbainas y cumplir el reto de los diez kilómetros, cada uno a su ritmo. “Lo importante es respetar las limitaciones de cada uno. Cada uno tiene que ir a su ritmo y no intentar seguir a alguien que esté en mejor forma que él. Tampoco hay que sufrir; cuando uno se ve fatigado, que pare y recupere”, advierte Iñigo. Consejos para que el riesgo siga siendo cero.