Efrén partirá más avanzado que nunca

Bilbao. Analizando el transcurso de los acontecimientos, Jaime Fernández Avilés, jefe del Team LaGlisse del que forma parte el vizcaino Efrén Vázquez, mostraba su satisfacción. Se proyectaba contento en la llegada a Francia, donde se disputa hoy la cuarta prueba del Mundial, una vez amainada la borrasca que supuso montar chasis Honda de inicio. Es así porque la progresión de su piloto tras ensamblar un esqueleto FTR es evidente y en el breve recorrido mundialista de su estructura deportiva ya puede presumir de haber estado entre las cinco primeras posiciones de una carrera. Razón para su orgullo, como ilustraba inmerso en detalles, es el hecho de que el trabajo que se viene realizando está cogiendo posos, está calcificando. Y esto lo permite el modus operandi, la manera de afrontar las situaciones. Una de ellas es la decisión de completar el mayor número de vueltas de entrenamiento en pista sin engancharse a rebufos, sin chupar ruedas. Lo que no camufla resultados ni concede engañosas ventajas que son falso indicador. De modo que lo que se consigue es por obra propia. Son tiempos de autor, sin el beneficio que se puede extraer del prójimo y lo cual siempre permitirá dicha baza llegado el momento. A esto no está recurriendo Efrén. Y sin ello, el de Rekalde fue ayer el segundo piloto más rápido de la parrilla de Moto3. Así, saldrá desde la segunda pintura en el circuito Bugatti de Le Mans, desde la mejor posición de salida de su carrera deportiva. El vizcaino solo se vio superado por el genial Maverick Viñales, que ayer se hizo en posesión de su primera pole de la temporada.

Efrén, cauteloso, prudente, tampoco quiere ahora, que pinta bonito, lanzar las campanas al vuelo. De hecho, este mejor resultado para la partida llega en un trazado donde el curso pasado rubricó uno de los cuatro podios mundialistas que alberga su palmarés. "No caigo en el error de fijarme un objetivo". Porque si siendo así ha llegado tan alto, aspira a ofrecer más de lo mismo. No quiere obsesiones, no quiere impaciencia, porque de ello ya ha pecado en otras ocasiones. Psicología del deportista, esa arma que tanto ha forjado de cara a la presente campaña, tal como reconoce. "Estamos muy contentos con el trabajo que venimos realizando, porque trabajando así, este año disfrutaremos", valoraba esperanzado, residiendo en la felicidad de una jornada "especial" que aprovechó para enviar agradecimientos a todos los que conforman su peana en el campeonato.

Las sensaciones, por tanto, están recuperadas y, en consecuencia, las posibilidades son mayores. Se extienden las fronteras. Efrén ya está en el escenario acorde a su talento.

En la liza por el título de Moto3, Viñales adquirió ventaja sobre el líder Cortese, que zarpará sexto. Fenati, entre tanto, fue 21º.

stoner cede su autoridad En MotoGP, Casey Stoner cedió su dominio en favor de Dani Pedrosa, quien conquistó su primera pole del curso, secundado por un notable Dovizioso, tercero, y Lorenzo, que fue cuarto; Rossi fue séptimo. "Si llueve será una lotería", argumentaba el mallorquín. Si bien, lo deportivo quedó ensombrecido por el anuncio de retirada de Stoner -dice estar más relajado tras hacer público su futuro, en el que no cree Doohan, quien, sostiene, rectificará en su decisión-, un lugar que quedará vacío y sobre el que se ciernen las especulaciones. No en vano, Marc Márquez, el otro poleman sabatino, éste en Moto2, fue cuestionado sobre sus intenciones de salto a la categoría reina. "Mi sueño es estar en MotoGP con una moto de fábrica", manifestó SuperMárquez, en el lugar donde en 2009 logró su primera pole. Lógico. Pero el reglamento establece que un novato que accede a la mayor cilindrada no puede montar en una moto de fábrica en su primer año. De todos modos, el morbo está servido, dado que este año expiran los contratos de todos los pilotos salvo los de Stefan Bradl y Bradley Smith, quien el próximo curso estará en la categoría reina con Tech3.