¡Uf! No veía el momento de que se acabara enero. ¿Cuánto dura el verano? Alrededor de 15 días ¿no? ¿Y cuánto dura enero? Pues 60. Enero es como una novela turca. Resulta eterno. Y eso que he seguido todos los tips recomendados para superar la cuesta. He preparado un excel precioso para planificar el presupuesto con la regla del 50/30/20 (50% de los ingresos destinados a las necesidades básicas, 30% a ocio y 20% a ahorro). ¡Un fiasco! Consultaba cada día en Selectra el precio de la luz según la franja horaria y sinceramente me he ahorrado una pasta porque con la tarifa desorbitada que veía, casi ni he encendido los electrodomésticos. Eso sí, las lavadoras que tengo pendientes son más largas que los vagones de Euskotren. He alimentado de clicks el Chollometro para encontrar ofertas y descuentos en cualquier tienda. He evitado las compras compulsivas, es decir me pensaba tanto cada una, y las dejaba reposar tanto que ni una bufanda en rebajas he pillado. Es que enero es mucho mes para tan poco sueldo. Aunque bien mirado, a estas alturas del IPC y del IVA, ya tenemos cuesta en cualquiera que dure más de tres semanas. Ha sido duro. Y encima me levanto y veo un post-it en el frigo que pone; Come brócoli, sal a correr y toma yogures desnatados, y ya directamente me dan ganas de meterme yo en la nevera a pasar el invierno, y alojarme allí hasta que llegue la primavera.