Cada vez que abro Tik Tok siempre me salen creadoras de contenido con cajas de artículos de tiendas de ropa. “Voy a hacer un unboxing”, dicen todas, utilizando la misma fórmula hasta la saciedad, mientras muestran a la cámara prendas de talla tan pequeña que es evidente que no podrían ponérselas ni en sus mejores sueños, promoviendo cánones de belleza poco saludables. Cuando una mujer acude a comprarse ropa no debe caer en la desmoralización o decida no probar bocado porque su talla, la 46 por ejemplo, está catalogada entre las especiales. Esta semana además la influencer sobre moda, Mada Mariño, ha subido un vídeo a su perfil en el que ha abierto un buen melón (como se dice en la red social) que ha derivado en un intenso debate. Mada ha explicado que Inditex le envía una tarjeta de regalo de 150 euros cada mes para comprar ropa, lo cual ha generado una gran ola de reacciones, tanto por parte de usuarios como de otras compañeras influencers que se quejan porque ellas no la reciben. Lo que da lugar a abrir otro melón: ¿Si hay influencers que reciben esa tarjeta deben etiquetar el contenido como publicidad o gifted? El panorama digital es en la actualidad un terreno sin ley, pero la Comisión Europea ya ha iniciado una investigación formal contra Tik Tok por falta de transparencia. Los creadores de contenido tendrán que dedicarse a eso, a crear contenido, y no informaciones patrocinadas o falsas.