PREMIO Nobel desplazado a la prensa del corazón: Verdaderamente, no sé si debo darle el pésame o felicitarlo por su ruptura con Isabel Preysler, anunciada a todo trapo por ¡Hola! Pese a que en lo personal no lo tengo en la mejor de las estimas, leyendo la noticia no pude evitar sentir cierta penilla al ver que la madre de Tamara Falcó lo había despachado. Pero luego leí a Martín Bianchi en El País y me enteré de que hace un año escribió un cuento sobre un hombre mayor que se arrepentía de haber abandonado a su esposa por otra mujer a la que ya no quería y se lamentaba con estas palabras:: “Fue un enamoramiento de la pichula, no del corazón. De esa pichula que ya no me sirve para nada, salvo para hacer pipí”. Así que a lo mejor ha sido para bien. l