MUNUERA Montero tomó tres decisiones trascendentales durante el partido y, la verdad, es que en ninguna se equivocó. Aunque en la primera de ellas tuvo que echar mano del VAR. En el minuto 39, en primera instancia, el colegiado jienense da por válido un gol del Levante tras un remate de Coke, que le quita el balón de las manos a Herrerín. Creo que hay un leve empujón del jugador granota, por lo que está bien anulado, aunque tal vez un árbitro más veterano no hubiese señalado falta. En el penalti que señaló en el minuto 48 sobre Roger no hay duda. Beñat e Iñigo Martínez obstruyen y derriban al rival. También acertó. Lo mismo que en el minuto 91, cuando decretó la pena máxima. Moses pisa claramente a Muniain dentro del área y Martínez Munuera no dudó. Luego consultó con el VAR, pero insisto, no tiene por qué hacerlo si él lo ve claro. El colegiado llevó el partido con altibajos, sobre todo en el aspecto disciplinario, donde no se guardó ninguna tarjeta. Y Berchiche no espabila, porque le perdonaron la expulsión tras su encontronazo con Roger.