Estimado señor Pradales: recuerdo cuando en mi infancia pedíamos a Olentzero una bicicleta, que no siempre llegaba, igual se retrasaba algún año. Hoy día en todas las casas hay varias, pero nos faltan espacios por dónde andar con ellas; usted se nos va de la Diputación, ahora que le veíamos más proactivo hacia las bicicletas y la movilidad sostenible. Una pena que se vaya cuando en el tema de bidegorris queda tanto por hacer. Tal y como está el planeta estas pequeñas medidas, locales, aunque no sea mucho, ya es algo y más cuando en la cumbre del clima les cuesta tanto llegar a acuerdos. Llevamos dos años, mes tras mes, realizando marchas de Bilbao a Galdakao y nos gustaría que antes de abandonarnos, a modo de Olentzero, nos dejase encaminado el tema del bidegorri entre estas dos poblaciones que están tan cercanas y sin embargo acceder o comunicarse en bicicleta es de extrema peligrosidad. Así pues antes de irse sería un gran regalo para los galdakaoarras, escuelas de BTT y gente de pueblos del entorno amantes de la bicicleta, que en los Presupuestos del próximo año se viese reflejada esta infraestructura. Horra, Horra gure Olentzero! Eskerrik asko y mucha suerte en su próximas responsabilidades.
