El que fuera futbolista de Mungia Manu Larrabeiti -fallecido en Eibar a los 87 años hace casi dos- jugó en 1959 en el Santiago Bernabéu la primera final de Copa, con el once andaluz. Según se recoge en Internet, “el Barcelona se impuso al Granada en la final por 4 a 1”. Con anterioridad, Larrabeiti participó como centrocampista en las filas del Eibar -segunda división-, Real Sociedad -máxima categoría- y Granada -alternando primera y segunda-. Entre otras actividades, el jugador sentía una verdadera pasión por la pintura -varias exposiciones le avalan-y la pelota mano.