Síguenos en redes sociales:

Búsqueda de equilibrio

O mucho me temo, o la dictadura comunista hereditaria de Corea de Norte sufrirá un golpe de estado auspiciado por China. El gigante asiático es el principal valedor del régimen norcoreano y no está precisamente contento con esta escalada de tensión entre Corea del Norte y EE.UU. De continuar esta crisis, países como Japón o Corea del Sur procederán a rearmarse y acercarse aún más a EE.UU., algo que no interesa al Imperio del Centro. Una guerra es impensable, supondría un descalabro y, lo que es más, quién sabe si terminaría por suponer un enfrentamiento entre China y EE.UU., como fue la primera Guerra de Corea. Así las cosas, esperemos que la realpolitik se imponga. Solo si las potencias respetan sus respectivas áreas de influencia evitaremos conflictos innecesarios. Rusia y China son actores internacionales de peso y, o la Administración Trump lo asume, o tendremos caldeado el ambiente en Oriente Próximo, Europa del Este y Asia.