He leído mucho últimamente, una frase atribuida al escritor francés Victor Hugo que resume de una manera muy clara( a mi modesto entender) hasta donde puede llegar la desidia o, permítanme, el “pasotismo” de los pueblos mal gobernados. La frase nos dice: Entre un gobierno que lo hace mal y un pueblo que lo consiente, hay cierta “complicidad” vergonzosa. En las pasadas elecciones de diciembre, perdimos la gran oportunidad de tener ese gran “gobierno del cambio” y misterios de la vida, las recientes encuestas electorales para la próxima cita con las urnas del 26 de junio siguen dando como ganador al partido político que posiblemente y durante su gobierno haya sido el más nefasto, incapaz, corrupto y que ha engañado más a la ciudadanía, sin pudor alguno y sin “despeinarse” en nuestra moderna historia parlamentaria. Estamos pues de nuevo ante otra nueva oportunidad, de cambiar, de “torcer” la lógica y terca estadística, de otorgarnos un gobierno que mire por el interés general, y no solo por el de unos pocos privilegiados que no seamos de nuevo “complices” de una nueva pero vieja manipulación, de nuevo se nos vuelven a anunciar más sacrificios y recortes (me supongo que para los de siempre), así que pongámonos ya en “marcha” para no ser nunca nunca complices ni consentidores del mal gobierno.
