La crisis vista por ojos mansos
La actual es la sociedad más complaciente con el poder y más valiente con los débiles. Me refiero a esa turba de ciudadanía resentida, mal informada y embrutecida que curiosamente nunca salen a protestar contra los mercaderes miserables, los banqueros mezquinos, los grandes defraudadores o los políticos corruptos que son los que provocan los grandes desfalcos, robos, estafas... pero que sin embargo se presta gustosamente a ser utilizada por el poder más conservador, rancio, manipulador y populista para el linchamiento de los pequeños perceptores de las ayudas sociales, sean justificadas o no. Pues bien ante la crisis que estamos padeciendo tiene un sentimiento inversamente proporcional al que siente cuando hay un accidente que no les toca de cerca, y que se transforma en que si es una cuestión multitudinaria como la actual, el impacto les pasa más desapercibido, lo dan como mal de muchos y se resigna como si fuera una maldición bíblica, sin embargo, lo sienten más injusto cuando el accidente es algo individual, como si fuera una desgracia inmerecida y peor de digerir.