Cada vez proliferan más los conductores que en lugar de señalizar sus intenciones con los intermitentes, dejan a la intuición de los demás el saber para dónde van a girar los muy insensatos.
Los coches disponen cada vez de más elementos de control: ayuda al aparcamiento, aviso de obstáculos, señales de que se pisa la raya, cámaras, etc. y en cambio esa palanquita disponible de serie desde tiempos inmemoriales, ya no se emplea. No es moderno marcar las maniobras. A este paso los fabricantes los darán como opcionales.
Y no solo es en ciudad o en vías urbanas, sino que puede ir usted por la autopista a 120 y encontrarse de sopetón con un kamikaze de estos que se plantan en el carril de al lado sin encomendarse ni a Dios ni al diablo. ¿Cuántas sanciones se ponen por este motivo? ¿Cero o ninguna? ¿Cuántos accidentes ocasionan estos incompetentes? Pues entiendo que bastantes y encima ellos ponen pies en polvorosa. Otro día hablaremos de los tres carriles de la A-8, por poner un ejemplo, y de la infrautilización del carril derecho. Tampoco es moderno ir a 100 por él. Es mejor ir pancho pancho por el carril central. Y el que venga detrás que arree. ¡Qué paciencia hay que tener!