Síguenos en redes sociales:

Metro y tranvía

Según cuentan, el primer ferrocarril del mundo fue construido y dirigido por el ingeniero de Minas inglés Ricardo Trevithick. Se inauguró el 24 de febrero de 1804 en el País de Gales, sobre una vía de 15 kilómetros y formado con una locomotora y cinco vagones que transportaron 10 toneladas de acero y a 70 hombres.

Desde entonces el ferrocarril ha dado impulso a los pueblos por donde ha pasado. Aquí estamos con nuestra Y vasca, que marcha lenta, pero marcha, sin decidir si será una vía sobre balasto, más indicada para el transporte de viajeros y mercancías o una vía sobre placa de hormigón, mucho más costosa.

Llegan ahora rumores e incluso se están haciendo estudios previos que entre Burgos y Vitoria se adaptará la vía actual a los 200 km/hora. En fin, nos costará llegar en tiempo más a la capital del reino, pero menos en dinero, pero que se haga.

Que no pase como con el tranvía de Rekalde, que por unas dudosas promesas se decidió no construir cuando se iban a iniciar las obras, porque se haría pronto el metro, que quizá llegue algún día, será cuando Dios quiera, mientras sin tranvía y sin metro durante muchos años.

Que el alcalde de Leioa pida una, dos y las veces que haga falta la construcción del tranvía, ahora que se han hecho las cocheras. El ferrocarril siempre ha llevado el progreso, allí por donde ha pasado, no digamos como aquel personaje, "que la vía no pase por mi pueblo ( calle), pero que el tren ( tranvía) pare".