Desde el principio teníamos claro que la capital de la Comunidad Autónoma no era Vitoria-Gasteiz. Sólo la sede del Gobierno y el Parlamento. Por eso, el alcalde Azkuna tiene toda la razón. Ahora quieren ser capital y cobrar por ello. La respuesta es muy sencilla, si tanto les cuesta ser capital que nos cedan esa aspiración a los demás. Se lo agradecerían los cientos de vascos que todos los días se tienen que desplazar a Vitoria-Gasteiz porque allí está la sede de las instituciones comunes. En mi opinión, son ellos los que deberían pagar un canon por tener el privilegio de ser lo que son.
En cualquier caso, en estos tiempos en que se reivindica la democracia directa, ¿no se podría plantear una consulta popular sobre este tema tan sensible? ¿O es que no tenemos derecho a decidir sobre qué capital queremos? El tema de la capitalidad es demasiado importante como para dejarlo en manos de los políticos.