EGAR la evidencia suele tener malas consecuencias. La Comunidad de Madrid ha venido minimizando su (grave, gravísima) situación sanitaria por el coronavirus e incluso su gobierno, el PP y sus satélites mediáticos han cargado contra Sánchez y en especial contra Fernando Simón (qué obsesión tienen con este hombre) bajo acusaciones de manipular los datos por motivos ideológicos. Ahora, con casi cien muertos en una semana, anuncia "duras" restricciones, como reuniones de más de diez personas y limitación de aforos. Seguro que les suena.