Síguenos en redes sociales:

ILP: lo que no se dice

EL pasado día 4 fue histórico. Al menos eso era lo que decían los titulares que al día siguiente leímos en los medios de comunicación. Sabin Zubiri, el ciudadano que ha hecho historia en la política vasca al tomar la palabra en el Pleno del Parlamento Vasco. Zubiri, miembro de la Plataforma Ciudadana por la Participación y Cambio en Euskadi Zubiak Eraikiz, defendía ese día la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para una escuela inclusiva. La propuesta llegaba respaldada por la firma de más de 17.000 personas.

Por lo tanto, reconocida la importancia del hecho, me gustaría hacer una serie de aclaraciones que son fundamentales para entender este asunto en su totalidad:

-Siendo la primera vez que un ciudadano no electo sube a la tribuna de oradores, no es menos cierto que diariamente los grupos parlamentarios escuchamos las reclamaciones, peticiones y sugerencias de la sociedad civil. Lo hacemos en las Comisiones y Ponencias, donde tomamos nota de sus reflexiones para después poder incorporarlas a la acción legislativa.

-No es la primera vez que una ILP llega al Parlamento avalada por las firmas de la ciudadanía. Sin ir más lejos, en la legislatura pasada, la décima, se trataron por lo menos dos, en las que tuve el honor de participar. La primera, la de la custodia compartida promovida por Kidetza, salió adelante con modificaciones y mejoras propuestas por los grupos parlamentarios; entre todos redactamos una Ley en la que se considera la custodia compartida como norma general en los casos de separación y divorcio, con excepciones regladas, y buscando siempre lo mejor para los hijos e hijas comunes, basado en el principio del bien superior a preservar. La segunda ILP, la de la modificación de la RGI, fue rechazada por el Parlamento Vasco. No aceptamos, salvo el Partido Popular, su debate en el órgano legislativo. Esta iniciativa recogió firmas, sobre todo en Gasteiz, con una implicación muy directa y activa de cargos representativos y bien conocidos del PP. Esta ILP también contaba con el número de avales exigido por la Ley en vigor en aquel momento.

-La Ley que regulaba la forma de tramitar las ILP no contemplaba la participación de los impulsores de la misma, más allá de la recogida de las firmas necesarias. Oídas las reiteradas peticiones de los promotores de las ILP, en el momento de proceder a la modificación de la Ley reguladora de las mismas se contempló la posibilidad de que algún o alguna representante de los grupos impulsores de la ILP pudiera intervenir en el Pleno en el que se fuera a debatir la misma para hacer su defensa directa.

-Es cierto que no se aprobó la toma en consideración de la ILP presentada por la Plataforma Ciudadana Zubiak Eraikiz que, como bien dijo su representante en el Pleno, Sabin Zubiri, contaba con el apoyo de 17.000 personas que la habían firmado y a los que representaba este ciudadano.

Como bien les recordó mi compañera Jone Berriozabal, Eusko Alderdi Jeltzalea recibió en las pasadas elecciones de 2016 al Parlamento Vasco 398.168 votos. Casi 400.000 personas apoyaron un programa en el que, entre otros muchos objetivos, se recogía el de una escuela inclusiva, equitativa y cohesionada socialmente. ¿Acaso estas 400.000 personas no se merecen también un respeto? Hubo otras dos formaciones que tampoco aceptaron la toma en consideración de la ILP y entre las dos sumaron 234.191 votos. Respetamos la opinión de quienes pusieron su firma en la defensa de esta ILP, pero ellos deben respetar también a los partidos que libremente la hemos rechazado y que representamos a miles de mujeres y hombres de este país.

-Este país es pequeño y nos conocemos todos y todas. Cuando el ciudadano Sabin Zubiri hizo la defensa de su iniciativa en la tribuna del Parlamento, además de criticar la postura de los partidos que no la iban a apoyar, enseguida surgieron voces de quienes le conocían, que sabían del pasado y presente político de este ciudadano. Sabin Zubiri no es un ciudadano sin adscripción política, no. Sabin Zubiri fue militante de las juventudes de Eusko Alkartasuna y en las últimas elecciones municipales celebradas en 2015 fue en la candidatura de Irabazi para concejal en el Ayuntamiento de Donostia. En 2016 fue responsable de Convergencias de Ezker Anitza y bajo estas siglas se presentó a las elecciones autonómicas de 2012. Por lo tanto, es evidente su implicación activa en política desde hace años.

-Nos parece peligroso que los partidos políticos utilicemos a personas próximas a nuestros intereses para presentar iniciativas legislativas en el Parlamento. Visto quién representaba a esta plataforma, no pudimos dejar de compararla con la ILP impulsada la pasada legislatura por afines al Partido Popular solicitando la modificación de la RGI.

La reivindicación de la escuela inclusiva la viene realizando Podemos desde hace tiempo, lo cual nos parece legítimo; por lo tanto, no entendemos que busquen a un ciudadano muy cercano para defenderla en el Pleno, cuando tienen todos los mecanismos legales para impulsarla directamente. Quizá se deba a que no habían conseguido el apoyo necesario en la Cámara y pensaron que valiéndose de la ciudadanía lo lograrían.

Creemos que hemos de ser respetuosos con todas las ILP que se presenten en el Parlamento Vasco, sobre todo cuando sean fiel reflejo de la voluntad de una parte de la ciudadanía y no la voz de los postulados concretos de algún partido político; sin olvidarnos nunca de las personas que nos han votado y nos han otorgado su representación, que será reiterada o no, cada cuatro años.