Eskerriak asko. Es lo primero que nos sale y además lo hace desde lo más profundo de nuestros corazones.
En diciembre de 2016, aita y ama ingresaron en la residencia Loramendi de Erandio donde fueron tratados con cariño y profesionalidad y por eso también les queremos dar las gracias de corazón. Dos meses más tarde aita y ama pasaron al Centro Asistencial Leioa, y lo que en un principio nos pareció que iba a ser perjudicial para ellos, se convirtió en el mayor de los regalos que se les podía otorgar.
El pasado día 23 de marzo aita nos dejó, pero gracias a todas las personas que trabajan en el Centro Asistencial Leioa se fue tranquilo, en paz y rodeado de un montón de cariño que se le ha dado en el que ha sido su hogar durante los últimos 14 meses de su vida.
Perdonadnos que no seamos capaces de recordar todos los nombres, pero todas las personas que allí trabajáis desde la directora, trabajadora social, médicos, enfermeras y enfermeros, auxiliares, fisios, recepción, limpieza, mantenimiento o cafetería, habéis demostrado un compromiso que ha ido mucho más allá de vuestra tremenda labor profesional. Habéis llegado al corazón de aita y, por supuesto, al nuestro propio y al de las personas que le queremos. Con vuestra ayuda recuperó ilusiones que había perdido.
Ahora Ama sigue allí con todos vosotros y eso nos da mucha tranquilidad. Sabemos que no va a estar sola y que no le va a faltar cariño, compañía ni protección, además del que le podamos dar nosotros mismos, o el resto de las personas que quieren a ama.
De nuevo, eskerrik asko.