Prioridades en Alta Velocidad
LAS notorias discrepancias entre el Gobierno vasco y el Gobierno español en cuanto al cumplimiento por este último de los compromisos y plazos de construcción de la red vasca de alta velocidad ferroviaria pueden dar pie a discusión en la retórica parlamentaria o en el debate político en los medios de comunicación, pero no en la realidad. Un simple cotejo de las inversiones realizadas este año y las presupuestadas para 2015 por el Gobierno que preside Mariano Rajoy, la relación inversamente proporcional de las mismas con la relevancia otorgada a la conexión vasca por la Unión Europea, los retrasos acumulados en el desarrollo de unas obras cuyo fin se previó inicialmente para 2016 y que ya se sitúa en 2020 y la comparativa con lo invertido y presupuestado para otros proyectos de alta velocidad en el Estado español deja mucho más que en entredicho el interés de Madrid no ya por finalizar sino por impulsar la que se ha venido en denominar Y vasca. La ministra de Fomento, Ana Pastor, puede tratar de disfrazar la realidad esgrimiendo los 220 millones que se consignan en los Presupuestos Generales del Estado de 2015 para la alta velocidad en Euskadi, pero esa cantidad es mínima en el capítulo de necesidades a estas alturas del proyecto y apenas alcanza un exiguo 6% del total de las inversiones presupuestadas (3.626 millones de euros) en el Estado. Es decir, únicamente 6 de cada 100 euros destinados a la alta velocidad ferroviaria en el Estado español en los PGE de 2015 llegarán, si llegan, al Corredor Atlántico que para la Unión europea tiene carácter prioritario. Mientras solo en la provincia de Orense están presupuestados 578 millones (353 en 2014), o 314 en Asturias, 238 en Valencia o 111 para conectar A Coruña y Vigo, mientras se prevé culminar la conexión Galicia-Portugal, el último tramo Sevilla-Cádiz o el ramal del AVE extremeño entre Plasencia y Badajoz, el Gobierno Rajoy es incapaz siquiera de cubrir las necesidades presupuestarias del nudo de Bergara, esencial en la configuración de la Y. Mientras se ha presupuestado la llegada en 2015 de la alta velocidad a Zamora, Palencia, León, Burgos, Murcia... siguen aún sin concretarse siquiera los proyectos de entrada del TAV a las capitales de la CAV y aún está en redacción el estudio informativo de la línea de conexión con Iruñea. ¿Qué entienden Pastor y Rajoy por prioritario?