No conozco la legalidad de Venezuela más allá de lo que hemos leído estos días, pero supongo que la interpretación de la norma, como en el resto de países del mundo, será más importante que su literalidad. Pero es urgente que algo suceda, sobre todo, después de leer en Periodista Digital que "Hugo Chávez ha sufrido un infarto y está tan demacrado que no se le pueden hacer ni fotos". Humanamente, la situación del presidente (electo y legítimo), es una lástima, pero ninguna democracia puede pararse por un representante. Eso solo pasa en las dictaduras.