En 2012 he sido aún más buena que el año pasado aunque parezca imposible. He trabajado muchísimo con gran dedicación y sacrificio, sobre todo, por la verdad y justicia en la destrucción prevenible del vuelo 103 de Pan Am en el que asesinaron a mi hermana Nieves junto con 269 vidas igualmente preciosas e irreemplazables. Esta carnicería, políticamente provocada, anunciada y esperada, ocurrió el 21 de diciembre de 1988 en Lockerbie, Escocia. Otros -principalmente oficiales gubernamentales, diplomáticos y grandes financieros- tuvieron conocimiento preciso previo que les sirvió para cambiar sus reservas y vuelos y salvar sus vidas. Este y otros aspectos esenciales permanecen silenciados manipulados y distorsionados en una farsa de verdad y justicia.

Este pasado 21 de octubre de 2012 hemos superado, sobrevivido algunos, cada vez quedamos menos, la barrera psicológica de 24 años como en los medios bursátiles, que es cómo las fuerzas en juego han cerrado obscenamente en falso nuestro caso en un mercado de agendas políticas y financieras por silencio de conveniencia que interesa a todos intentando ahora controlar el mismo círculo vicioso en nombre de la verdad y la justicia.

Os pido: Verdad y Justicia para el Pan Am 103 y así acabar este calvario. Paz para todos en el mundo y para nosotros en particular, algo que deseamos desde el 21 de diciembre de 1988, algunos lo estamos pagando muy caro.

Mucha ayuda, solidaridad y respeto con las víctimas. Salud para continuar luchando incluso con mayor determinación. Un poco de suerte u otra vía de fortuna para poder resistir y sostener con dignidad la enorme carga de estos, por ahora, 24 años, una sentencia de por vida de David contra Goliat -tan alejado de nuestros medios- en una aproximación infinitesimal a la proporcionalidad. Mucho carbón para algunos de los caracteres más malvados y sanguinarios con piel y discurso de corderos democráticos, que mal dirigen este mundo a la guerra, muerte, odio, miseria, pobreza, sufrimiento, opresión y tortura preservando su impunidad y obstruyendo la verdad y la justicia del caso Pan Am 103 y negándonos nuestros derechos. No doy nombres ahora, porque sois Magos y lo sabéis todo.

Esta carta es parecida a la del año pasado pero es que no me habéis traído nada de lo que os pedí.