De vacaciones
Actualmente, hasta el disfrute de las vacaciones se ha convertido en un problema. A nivel político, en el caso del presidente del Gobierno, ha sido duramente criticado por el principal partido de la oposición (PSOE) por tomarse un corto periodo de descanso, cuando lo suyo, en opinión de los socialistas, habría sido renunciar a ello y permanecer en La Moncloa sin moverse en función del delicado momento que está atravesando el país. Lo que antes era considerado como algo normal, ahora se ha convertido en un arma arrojadiza y descalificadora, como si el optar por la renuncia supusiese la solución de todas nuestras desgracias. La verdad es que puestos a decir idioteces, somos únicos.
En este verano, Mariano Rajoy, eligió para el tramo final de sus vacaciones, el Coto de Doñana, siguiendo la vergonzosa tradición de veranear a costa de erario público. Paradisíaco lugar que ya utilizaron en su momento Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, gratis total igualmente. (...)
Siguiendo con el descanso estival y admitiendo que no son magnitudes comparables, los miembros de la Casa Real, tampoco lo han tenido nada fácil este año. La famosa foto de familia ha desaparecido por motivos de diversa índole. (...)
En tercer lugar, refiriéndonos a eso que entendemos como "familias normales", cuando se comparte el veraneo con otros miembros de la rama política, o bien con hermanos cuyas mujeres no se soportan, parejas rotas que aportan hijos de matrimonios anteriores, etc. las vacaciones se convierten en un suplicio, al comprobar como ese endosado que con tanto sacrificio han comprado en Marbella, cuya hipoteca terminarán pagando los nietos, se ha convertido en el mayor error de su vida. El problema está en la ubicación de la segunda vivienda. Si la adquisición hubiese sido, por ejemplo en La Almunia de doña Godina, no aparecería ni un alma, pero eso de poder contar que uno veranea de gañote y encima en la cosmopolita Marbella, mola cantidad. (...)
¡Así es la vida!