El pasado martes 31 de agosto, mi hijo Noah de 16 meses de edad se hizo una brecha que requirió dos puntos de sutura en un parque infantil de mi municipio. Se dio un golpe en la frente contra la arista de un banco.

El parque, que en teoría debería de estar preparado para los niños, evitando todos los aspectos de riesgo, alberga diversos bancos de piedra con esquinas como filos. Existen cuatro bloques como éste que suponen un riesgo evidente para los menores que cada día acuden al parque y ante el que el Ayuntamiento no ha tomado ninguna medida.