El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, recalcó ayer que las autoridades “harán todo lo que sea necesario para restaurar la seguridad en el norte”, tras tres meses de enfrentamientos con el partido-milicia chií Hizbulá en la frontera con Líbano.

Netanyahu, que cursó una visita a los militares de una unidad desplegada cerca de la frontera con Líbano, afirmó que su Gobierno trabajará para que los evacuados de varias localidades en la zona “puedan volver a casa de forma segura”. “No se puede jugar con nosotros”, ha advertido.

“Hizbulá se equivocó mucho con nosotros en 2006 y se está equivocando mucho ahora”, señaló, antes de incidir en que el grupo “pensó que éramos débiles como una tela de araña, pero de pronto ven a la araña”, manifestó, según una transcripción de su discurso facilitada por el Gobierno israelí.

Así, reseñó que Hizbulá está viendo “el tremendo poder” del Ejército de Israel y “la unidad de la gente”. “Mi política es hacer lo que sea necesario para restaurar la seguridad en el norte”, reiteró, antes de incidir en que “se hará todo lo que sea necesario para ello”.

“Desde luego, preferimos que esto se logre sin una campaña amplia (de combates), pero nada nos detendrá. Les hemos dado un ejemplo de lo que les está pasando a sus amigos en el sur –en referencia a la ofensiva contra la Franja de Gaza–. Eso es lo que pasará en el norte”, amenazó.

Siguen los combates

En este contexto, el Ejército israelí continuó ayer con ataques a posiciones de la milicia chií Hizbulá en Líbano, entre ellos contra un puesto militar del grupo, mientras continúan las hostilidades y el fuego cruzado en la frontera libanesa-israelí. “Durante la noche, las fuerzas israelíes atacaron numerosos objetivos de Hizbulá en el Líbano”, aseguró un portavoz militar.

La aviación atacó “un complejo militar de Hizbulá en el área de Marwahin”, y también apuntó contra un miliciano con un lanzador de cohetes y “una infraestructura terrorista en la zona de Ayta ash Shab”, agregó la misma fuente.

Por otro lado, un aparato aéreo no tripulado israelí atacó a un lanzador de proyectiles en territorio libanés, y “un helicóptero atacó en un área desde la cual se llevaba a cabo un lanzamiento de misiles antitanque hacia Israel”, dijo el Ejército en un comunicado.

En la mañana de ayer, milicianos en Líbano lanzaron un misil antitanque hacia la ciudad norteña israelí de Kiriat Shmoná, y “en respuesta, las tropas atacaron varias zonas de territorio libanés”. Además, en nuevos ataques aéreos durante la mañana, aviones de combate “atacaron una serie de objetivos terroristas de Hizbulá”, entre ellos “sitios militares desde donde operaban terroristas”.

Ataque a un dirigente chií

Por otro lado, un comandante del grupo chií libanés murió ayer en el bombardeo con un dron israelí del vehículo en el que viajaba por el área de Khirbet al Salam, en el sur del Líbano y donde también perdió la vida al menos otro pasajero, informaron diversas fuentes.

Hizbulá anunció en un comunicado la muerte de su “comandante” Wissam Hassan Taweel alias ‘Hajj Jawad’, identificándole como “mártir en el camino a Jerusalén”, como se suele referir de forma genérica a sus bajas a causa del fuego que cruza con Israel en las áreas fronterizas entre los dos países.

Una fuente cercana al movimiento chií que pidió el anonimato confirmó que Taweel fue asesinado mientras viajaba en un vehículo por Khirbet al Salam y que la víctima pertenecía a las fuerzas especiales Radwan.

Las fuerzas de élite Radwan, especializadas en operaciones ofensivas, se retiraron de la franja inmediatamente fronteriza con Israel en las últimas semanas tras una serie de esfuerzos diplomáticos, pero el ataque de ayer tuvo lugar a casi 20 kilómetros de la divisoria entre Líbano e Israel.

Copia de Gaza

Ministro israelí de Defensa.

El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, afirmó ayer que Israel puede “copiar y pegar” en Beirut la destrucción causada por la ofensiva contra la Franja de Gaza. “Ven lo que está pasando en Gaza. Saben que podemos copiarlo y pegarlo en Beirut”, afirmó Gallant en declaraciones a ‘The Wall Street Journal’, antes de argumentar que Israel “combate contra un eje, no contra un único enemigo” y que “Irán está creando un poder militar en torno a Israel para usarlo”.