La Comunidad Económica de Estados del África Occidental (Cedeao) acordó ayer la activación “inmediata” de una fuerza regional con vistas a una posible intervención en Níger, para recuperar el “orden constitucional” tras el golpe de Estado que supuso la destitución del presidente, Mohamed Bazoum, anunció el presidente de la comisión del bloque, Omar Alieu Touray. “Ordeno la activación de la fuerza de reserva de la Cedeao con todos sus elementos inmediatamente”, dijo Touray en la cumbre celebrada en Abuya, la capital nigeriana.
Aunque el bloque sigue decidido a resolver la crisis por la vía “pacífica”, el anuncio realizado por Touray en la cumbre extraordinaria de la Cedeao convocada en Nigeria implica de facto un primer paso hacia la hipotética intervención. El bloque ya amenazó con ella tras el golpe e incluso dio un ultimátum a la junta militar para renunciar al poder, sin encontrar una repuesa positiva.
Sin embargo, el presidente de Nigeria, Bola Tinubu, señaló que es “crucial” priorizar el “diálogo”. “Es crucial que prioricemos las negociaciones diplomáticas y el diálogo como la base de nuestro enfoque”, dijo Tinubu durante su discurso.
“Debemos involucrar a todas las partes, incluidos los líderes del golpe, en discusiones serias para convencerlos de que renuncien al poder y reinstalen al presidente (Mohamed) Bazoum”, añadió.
Para el mandatario nigeriano, la “crisis política no solo representa una amenaza para la estabildad de Níger, sino que también tiene implicaciones de gran alcance para toda la región del oeste de África”. Por ello, Tinubu destacó la importancia de “garantizar un retorno rápido a la gobernanza constitucional en Níger”, formentando así “un entorno propicio para el crecimiento y desarrollo para todos”.
Sin respuesta
La junta militar nigerina ha hecho caso omiso a los llamamientos de la Cedeao e incluso ha dado pasos para consolidarse, incluido el nombramiento de altos cargos. Entre sus aliados destacan las autoridades de Burkina Faso y Malí, que ya han avisado de que una hipotética intervención militar en Níger supondría una “declaración de guerra” también contra ellos.
Los golpistas nombraron ayer un nuevo gobierno de transición dotado de 21 ministros, seis de ellos militares, y colocaron al frente del Ejecutivo al exministro de Economía Alí Lamine Zeine, cuya designación ya había sido anunciada a principios de esta semana.
El general nigerino Abdourahmane Tchiani, antiguo jefe de la Guardia Presidencial y ahora líder del Consejo Nacional para la Salvaguarda de la Patria (CNSP), firmó un decreto sobre la formación del gobierno transitorio. El texto refleja que dicho Gobierno estará formado por figuras civiles y militares y que Zeine, además de estar al frente del Gabinete, ostentará la cartera de Economía y Finanzas.
Al frente de Defensa estará el coronel Salifou Mody, mientras que el general Mohamed Toumba encabezara el Ministerio del Interior. A ellos se sumarán Abdourahamane Amadou, Bakary Yaou Sangaré, Garba Hakimi, Soumana Boubacar, Mahaman Elhadj Ousmane y Mahamadou Saidou como ministros de Deportes, Exteriores, Sanidad, Presidencia, Agricultura y Educación, respectivamente.
Aviso de la ONU
En este contexto, la Secretaría General de la ONU advirtió ayer contra “cualquier amenaza de lastimar al presidente electo de Níger”, Mohamed Bazoum. El portavoz de la Secretaría, Farhan Haq, fue preguntado por las supuestas amenazas de los golpistas de matar al presidente Bazoum si se concretase una intervención militar contra el país, y dijo: “Nos opondremos a eso”, sin ser más específico.
