Las vacaciones ya le quedan lejos a Anne Erauskin. A principios de junio pasó unos días en Mallorca, luego visitó algunos escenarios de la deliciosa Rivera francesa y, sin salir del Mediterráneo, culminó su viaje en Barcelona después de una temporada (otra más) de ensueño con su club, el Bera Bera. La entidad donostiarra se llevó el título de la Liga Guerreras Iberdrola, el décimo de su historia, además de la Supercopa, la Copa y quedarse a las puertas de la final four del balonmano europeo. La extremo derecho de Ermua fue uno de los pilares del equipo y renovó por dos temporadas más, hasta 2027. 

Anne apura la pretemporada con el Bera Bera antes del arranque liguero este sábado 30 de agosto en Gasca, ante el Conservas Orbe Zendal Porriño. La jugadora internacional con la selección española e integrante de la fundación Basque Team, de 26 años, reconoce que viene de haber firmado su mejor curso deportivo en la élite. Pero no se conforma. Entrar en la F4, la gran cita del balonmano continental, sería uno de esos sueños imposibles que cada temporada parecen estar más cerca de hacerse realidad. “Ojalá podamos repetir un nuevo triplete. En Europa tenemos que dar un pasito más, aunque nos ha tocado un grupo complicado”, reconoce la guipuzcoana. 

En el plano personal, Anne no esconde su deseo de seguir contando en los planes de la selección española. Desde su debut el año pasado en el combinado de Ambros Martín, parece haberse hecho un hueco en una plantilla muy competitiva. Ella es consciente de que tendrá que pelear por un puesto, ya que “nadie es imprescindible”. Estos meses serán claves en este sentido. El Mundial está a la vuelta de la esquina: se celebra conjuntamente en Alemania y Holanda entre el 16 de noviembre y el 14 de diciembre. 

DE TRIPLETE EN TRIPLETE

Liga, Copa y Supercopa. El conjunto donostiarra ha logrado dos tripletes consecutivos. ¿Será capaz de pulverizar todos los récords y lograr encadenar un nuevo triplete esta temporada?

Primeros tiempos. Uno de los impulsores iniciales de la carrera deportiva de Anne Erauskin fue Mikel Martín, histórico técnico vasco de equipos femeninos. Fue su entrenador en el balonmano base.

Siempre positivo

En su perfil profesional de LinkedIn se define como una persona “constante, positiva y responsable”. La jugadora del Bera Bera añade otros dos adjetivos más para completar la descripción (“sacrificio y constancia”), además de subrayar su optimismo, puesto que siempre trata de “ver el lado bueno de las cosas”. Cuando en 2020 terminó el grado en Dirección y Administración de Empresas en la UPV/EHU, hizo sus prácticas en una comercializadora eléctrica. Cinco años después sigue parcialmente ligada a la empresa “para no perder el contacto con el mundo laboral”. Teletrabaja un puñado de horas a la semana, encargándose de las labores administrativas. “A veces es bastante mecánico, pero intento hacer un poco de todo”, asegura. 

Anne Erauskin junto a sus compañeras tras una victoria. Instagram: @anneera

Vive en el barrio donostiarra de Bidebieta, en la periferia de la ciudad. Cerca de su casa se encuentra el local Estudio 36 Cerámica, donde a veces acude a sus talleres de modelado manual para desconectar, relajarse y compartir su tiempo de ocio con otras personas. Anne es de gustos sencillos. En su tiempo libre, descansa, sale a pasear por la Concha con música y va a la playa o al monte. Le gusta San Sebastián. “Vivir en Donostia es un lujo. No sientes el agobio de una ciudad, en ese sentido es como un pueblo grande”, describe. 

Otras cosas que también han quedado lejos: las inseguridades, los nervios, los bloqueos mentales. Recuerda ahora que en su primer año en la División de Honor, en las filas del Zuazo, tuvo que aprender a lidiar con la presión y la sensación de fracaso con ayuda de psicólogos deportivos. Como ocurre con otros aspectos de la vida, se lo tomó como un aprendizaje. “Soy la jugadora que soy ahora gracias también a todo el trabajo mental que tuve que hacer entonces. Esa fue la base de todo lo que ha venido después”, explica.