iruñea - La actual Junta Directiva de Osasuna anunció presuntas irregularidades por importe de 15,9 millones de euros durante la anterior gestión de la entidad, desde 2004, tras el informe de auditoría realizado y presentado ayer al Gobierno Foral.

La directiva navarra, que lleva un año en el club, denunció estas supuestas irregularidades en el juzgado de guardia de Iruñea, según manifestó el presidente de Osasuna, Luis Sabalza, en una rueda de prensa junto al abogado del club, Miguel Ezcurdia, e Iñaki Larrañeta, autor de la auditoría de gestión.

De estos 15,9 millones de euros, 10,2 millones corresponden a “pagos con destino desconocido bien por transferencias o en efectivo” que podrían suponer un delito de apropiación indebida y 5,7 millones a “pagos a sociedades pantalla” que se han estimado que pudieron ser utilizadas para pagar menos impuestos.

Algunos de los anteriores gestores y empleados del club ya se encuentran investigados desde el pasado año por el Juzgado de Instrucción número 2 de Iruñea por presuntas irregularidades, incluidos supuestos amaños de partidos del final de la temporada 2013/14.

Sin embargo, el abogado del club explicó que la denuncia presentada ayer no se suma, en principio, al denominado caso Osasuna, ya que son nuevos hechos, diferentes, que para no perjudicar a la causa actual se ha presentado en el juzgado de guardia.

Falsa contabilidad Esta nueva denuncia, que abarca la presidencia de Patxi Izco (2002/12) y Miguel Archanco (2012/14), llega tras la entrega el miércoles de la auditoría de gestión encargada por el club como una de las condiciones de la Ley Foral de 2014 de la reestructuración de la deuda tributaria de Osasuna.

El informe, de 110 páginas tras 2.000 horas de trabajo, considera que en el periodo investigado, desde 2004, los anteriores gestores presentaron unos resultados positivos de 17 millones de euros, cuando la realidad contable era de 44 millones en negativo, es decir una diferencia de 30 millones de euros.

La auditoría refleja una posible deuda pendiente y no prescrita con la Hacienda foral de 6 millones de euros, como consecuencia de estas irregularidades, aunque el club entiende que la Ley Foral de 2014 es de punto final a los términos recogidos en dicha ley.

El informe de gestión hecho público ayer trata de analizar la contabilidad del club y otra documentación administrativa para buscar evidencias de “posibles malas prácticas que pudieron explicar el grado de endeudamiento”, y determinar “posibles irregularidades”, dijo Sabalza.

La conclusión del auditor, que indicó que algunas prácticas eran un “poco chapuceras”, es que se llevó “una contabilidad creativa, muy subjetiva” que pretendía “presentar unas cuentas positivas” de “club saneado”.

Sabalza, visiblemente molesto con esta situación, afirmó sentirse “muy dolido” porque el “nombre y el sentimiento de Osasuna vuelven a estar en la picota y en los juzgados”. “Me siento mal, porque no es agradable”, manifestó el presidente rojillo, que anunció que la próxima semana se presentará el plan de viabilidad.

El auditor señaló que “grave es todo” lo que sale a relucir, “desde las pequeñas cantidades”, pero subrayó que lo peor, a su juicio, es presentar unos balances de cuentas irreales a la asamblea de socios compromisarios. - Efe