Leioa/Portugalete/Getxo - Detrás de un equipo hay todo un pueblo. El balón, en un campo, lo mueven todos y cada uno de los vecinos. Cada toque es un pálpito del corazón de los aficionados. Tres municipios, tres clubes de fútbol, ponen en juego este fin de semana sus emociones en los partidos de vuelta de la primera fase de los play-off de ascenso a Segunda División B. Todo Leioa, todo Portugalete y todo Getxo juega en Sarriena, La Florida y Gobela.
El orgullo de los vecinos pintado en azulgrana
El temporadón del Leioa espera esta tarde (19.00 horas) el descorche más dulce. El 1-4 del duelo de ida ante el Varea permite sueños terrenales, por eso, pasadas las 20.45 horas es muy posible que el club haya hecho historia y, también, que haya conseguido algo más. "Este año se ha logrado la unión del pueblo con el equipo. La gente suele presumir de ser de Leioa, pero no del Leioa. Sin embargo, creo que esta temporada, los vecinos se sienten orgullosos de su club", comenta Iván Crespo, uno de los miembros de la peña Leioa Zaleak, que se ha fundado esta misma campaña. Iván es seguidor del conjunto azulgrana desde hace años, es de esos fieles que planea su fin de semana en torno al partido del Leioa. "Cada quince días, la rutina es la misma: tomar un café en el bar a las cuatro y pico y, después, subir a Sarriena", admite. Y siempre que pueden, su cuadrilla y él, viajan fuera. El destino más especial lo halló la pasada semana: "Fue el día ideal". Ese fervor hacia unos colores, esa pasión de Iván, se ha ido contagiando a numerosos vecinos del municipio. "A Logroño fuimos más de 200 personas, y muchas de ellas comimos con la plantilla, estuvimos todos juntos en un restaurante", describe Iván. "Ese día enganchamos a mucha gente a su club", insiste. Hoy, ese nuevo idilio del pueblo con su equipo se confirmará.
"Ya nos toca subir, tenemos confianza"
"Aquí huele a victoria". Los aficionados del Portugalete tienen muy claro que el encuentro de mañana será favorable para ellos. Cuentan con experiencia en los play-offs de ascenso. En los últimos ocho años, de hecho, han jugado siete. Pero esta es la definitiva. "Ya nos toca", asegura en La Florida una representación de la marea gualdinegra que acompaña al equipo en cada partido, ya sea en casa o a kilómetros de ella.
El encuentro contra el Pontevedra comenzará a las 11.30 horas, pero los ánimos para el equipo se han colado ya por las calles de la villa. "La primera eliminatoria la solemos pasar, las otras dos son las que se nos resisten", aseguran Jesús, Mari Carmen, Francisco, Ainara, Txema, Blas, Pilar, Neli, Juan Antonio, Alejandro, Tomasi, Carlos, Aritz y Naia, Aitor, Marisol, Mikel, César y Vanesa, todos ellos miembros de las asociaciones Hamalau y Argikuntza. Ellos, fieles a los chicos de La Florida, auguran una buena entrada para mañana. "Tiene que arder el campo", animan. Muchos han visto ya al Portu en Segunda B, cuando subieron de categoría en 2006, por eso viven con mayor ilusión aún el encontrarse de nuevo a las puertas. "En la eliminatoria de mañana va a haber mucha gente, en la siguiente mucha más, y la tercera, si llegamos, vamos a reventar el campo", cuentan equipados con camisetas y bufandas.
El club jarrillero, con más de 1.100 socios, está contando este año con una ayuda divina. Sí, sí. La afición ha encomendado las victorias de este play-off ascenso a dos estampitas que compraron durante la procesión del Nazareno, en Bilbao. "Desde Semana Santa hemos llevado a todos los campos una imagen de la Virgen María y el Jesús Nazareno, y desde entonces estamos ganando", afirman. Quién sabe. Ayuda divina aparte, lo importante es marcar goles y poder celebrarlo en el pueblo. "Y si no lo conseguimos, otro años será. Por ilusión no va a ser".
La ilusión por quitarse esa espinita clavada
Las Arenas y gran parte de Getxo piensan estos días en rojinegro. Tanto es así que la ikurriña de la plaza de La Estación de Areeta ha mutado de piel y se ha convertido en una bandera del Arenas que ondea a los cuatro vientos. Y es que el club se ha convertido en uno de los principales temas de conversación en la localidad. Quien más quien menos estará pendiente de lo que ocurra hoy a partir de las 18.00 horas en Gobela en el encuentro que enfrenta a los getxotarras y al Jerez de los Caballeros. La ilusión reina en el barrio y la afición que afronta con muchísimas ganas el reto de ese ascenso a Segunda División B que se quedó a un suspiro la pasada campaña. Un buen termómetro para ver el estado de ánimo de la afición es el bar El Arenas, sede del club rojinegro. Tras la barra está Francisco Hidalgo, camarero y socio del Arenas. Desde su posición y por su relación con los clientes en el día a día ya ha captado la especial "ilusión" que siente la hinchada. Txabiru Pérez es uno de esos aficionados que se encuentra entre el optimismo y la cautela con la posibilidad de un ascenso. "El año pasado acabamos la temporada con cara de tontos, por eso espero que este lo finalicemos con una sonrisa y el ascenso", señala este hombre cuya garganta será una de las alrededor de mil que tratará de llevar hoy al Arenas en volandas hacia la segunda eliminatoria de ascenso. "Va a ser un choque duro, este tipo de partidos son muy difíciles de jugar y la afición ha de volcarse con el equipo", indica Francisco. De la misma opinión es Txabiru, quien ve en los extremeños "un rival muy difícil y duro". La cautela no es sinónimo de pesimismo y muestra de ello son Ricardo e Iñaki. "El Arenas ha jugado bien este año y creo que hay motivos para confiar en el equipo. Además, el hecho de jugarnos el pase a la siguiente ronda en nuestro campo es una garantía", destacan.