La remisión de la pandemia y la progresiva recuperación de la actividad económica y el empleo ha favorecido el aumento del índice de confianza de los hogares vascos sobre la evolución socio-económica general, que durante el tercer trimestre de este año se ha situado en 5, frente al pesimismo que impera en el Estado español, que se cifra en -9.

Según el informe periódico que elabora cada tres meses Laboral Kutxa, a lo largo de julio, agosto y septiempre pasado, los hogares de Euskadi han reforzado la recuperación de su confianza que ya apuntaron en el segundo trimestre del año y después de la "debacle" que supuso la pandemia de la covid-19 y que hundió su confianza a niveles similares a los registrados en la crisis de 2008.

El estudio concluye que el incremento de su confianza respecto a la evolución de la economía en general y del empleo, que se ha consolidado en valores positivos, concretamente, en el 6 y el 11, respectivamente, se trasladada a "un mayor dinamismo del consumo y de algunos componentes de inversión, como es la vivienda.

Esta situación se traduce en que "afrontan el otoño más optimistas" pero con "una cierta preocupación sobre la evolución de los precios", indica el informe, que agrega que este factor de incertidumbre "condicionará sus decisiones de ahorro, gasto e inversión".

Las expectativas de los hogares vascos sobre su capacidad de ahorro también son positivas (5), mientras que las referidas a la economía de su hogar son todavía negativas (-4).

No obstante, el informe indica que, pese a recuperar la confianza, las familias vascas "empeoran la valoración del momento actual" a la hora de hacer grandes compras (-16), lo que se atribuye a "unas peores expectativas sobre la evolución de los precios" (-44).

El estudio agrega que, "paradójicamente, mantienen sus expectativas" en cuanto a la posibilidad de hacer grandes compras (2) y la intención de inversión en vivienda y compra de vehículo (1,1% y 6,4%), índices que mejoran pero "muy lentamente.

En general, los resultados de 2021 "confirman la recuperación del consumo de los hogares vascos", que en el segundo trimestre aumentó el 7,1 % con respecto del primer trimestre, según los datos del Eustat, mientras que la compra-venta de viviendas en Euskadi, acumulado enero-junio, aumentó en relación a 2020 (+23,3%).