Las entidades bancarias con las que se ha puesto en contacto la Asociación para la Defensa del Modelo de Igualatorio (Ademi) han destacado la liquidez de la que dispone el IMQ y su capacidad para lograr financiación de forma "recurrente" en el futuro. Ademi ha sondeado a varios bancos de primera línea en Euskadi, que le han trasladado su interés por participar en su proyecto y, lo más importante, estiman que la compañía tiene recursos y margen para crecer.

Así lo trasladó a varios accionistas el pasado jueves el asesor de Ademi Igor Gorostiaga (Norgestión). A las puertas de la junta del 30 de junio, las dos sensibilidades del Igualatorio -los que apuestan por que los médicos mantengan el control y los que quieren reforzar la presencia de SegurCaixa Adeslas en el grupo- llevan semanas celebrando diversas reuniones informativas con socios.

En el último encuentro de Ademi, Gorostiaga explicó los detalles de su propuesta, algo que tiene previsto hacer el consejo mañana miércoles con la presencia de representantes de Adeslas. Los planteamientos son antagónicos. A un lado de la balanza, un grupo de socios promueve un nuevo proyecto basado en el relevo generacional entre médicos del accionariado. Al otro, el consejo estima que el futuro de la compañía pasa por vender acciones a un tercero y el único candidato es la aseguradora de Caixabank y la Mutua Madrileña. La junta inclinará el resultado con su voto. De momento, la letra pequeña de la oferta de Ademi es la que más ha trascendido fuera del círculo de médicos y una de las notas más positivas es la confianza de la banca en el balance contable actual del IMQ. Un punto de partida sólido sobre el que levantar un nuevo proyecto empresarial.

En el caso de los accionistas que apuestan por revisar el modelo pero manteniendo el control de la compañía, el plan A empieza por definir cuántos médicos se quieren ir de la compañía y cuántos socios actuales y facultativos que no son accionistas quieren adquirir una participación. Según una encuesta realizada la semana pasada por Ademi, es mayor el interés por comprar que por vender y en ese caso no sería necesario buscar otras fórmulas.

fortaleza financiera

Si por el contrario las salidas desbordan las peticiones de entrada, se establecen seis herramientas para facilitar el proceso con diferente grado de preferencia. Las dos primeras opciones permitirían la salida de entre 167 y 225 accionistas. Por un lado, a juicio de Norgestión, se podría destinar entre 25 y 40 millones de euros del excedente de tesorería a la compra de acciones. Por otro lado, cabría la posibilidad de reducir el margen de solvencia de 220 puntos a los 180 puntos que exige la Dirección General de Seguros y destinar a facilitar la salida de 71 accionistas algo más de 18 millones de la provisión ante contingencias.

Aunque se confía en que no sean necesarias, estas dos cuestiones están en la zona verde del planteamiento de Ademi porque, "no comprometerían el control ni la buena marcha de la compañía". Con todo, ambas herramientas necesitarían el visto bueno de Adeslas, propietario del 45% de IMQ Seguros. Los responsables de Ademi estiman que sería posible alcanzar un acuerdo con la aseguradora porque siempre ha sido un "socio razonable". Sin embargo, recuerdan que si no fuera posible el entendimiento podrían acudir a un arbitraje, como establece en el pacto con Adeslas.

El semáforo se pone naranja con las dos siguientes herramientas para dar salida a accionistas, solicitar un préstamo a una entidad bancaria o buscar financiación en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF). Y la luz pasa al rojo, son el último recurso, con la posibilidad de vender inmuebles o de entrada de un socio externo en el accionariado.

Son opciones guardadas en orden en varios cajones y en el primero está la de favorecer la entrada de médicos en el accionariado. Varios miembros de la dirección de Ademi, con Martín Axpe al frente, expusieron el resto de las claves de su propuesta. El empresario José María Martínez-Amutio, hijo de un conocido accionista de IMQ ya retirado, explicó el resultado de la encuesta encargada por la Asociación.